La cocina española ha alcanzado un nivel notable de intercambio cultural, destacó el reconocido chef Ferran Adrià en una reciente entrevista concedida a Europa Press durante su visita a Cuenca para recibir un reconocimiento de la Capital Española de la Gastronomía. En el transcurso de la conversación, Adrià hizo hincapié en la diversidad culinaria que caracteriza a las ciudades españolas del presente, señalando la proliferación de restaurantes que ofrecen gastronomía internacional como la japonesa, china y mexicana, lo cual considera un indicativo de los cambios que continuarán surgiendo en este ámbito.
El cocinero también instó a reconocer la relevancia económica de la gastronomía, advirtiendo que a menudo se subestima su importancia al ser vista meramente como una forma de entretenimiento. Sin embargo, la realidad es que una hipotética huelga de cocineros podría provocar un efecto devastador en la economía del país, llegando a afectar hasta un tercio del PIB español. Dicha repercusión no solo repercutiría en la hostelería y el turismo sino también en la industria agroalimentaria al completo.
A pesar de las tendencias actuales que reflejan incrementos en los costes de producción que impactan al sector, Adrià subraya que ciertos gastos, como disfrutar de un café en una terraza, deben ser valorados como el lujo que son y no tomados por garantizados. La pandemia ha puesto de relieve el papel esencial de bares y restaurantes como puntos de encuentro social, y aunque se muestra partidario de que más personas puedan acceder a buena gastronomía regularmente, recalca que no es viable una reducción significativa de precios.
Ferran Adrià, siempre inmerso en la innovación, reveló que actualmente está trabajando en diversos proyectos conjuntamente con Telefónica, específicamente en la integración de la inteligencia artificial en la cocina. Aunque reconoce que la tecnología está en una fase inicial y adolece de una falta de datos, el chef contempla un futuro prometedor una vez que se superen estos obstáculos iniciales.
Finalmente, Adrià opina que la presencia de un cocinero creativo de renombre en la ciudad de Cuenca podría provocar un «efecto arrastre», beneficiando a restaurantes tradicionales al promover un nivel de calidad y gestión acorde a los estándares de la cocina creativa. Con su perspectiva siempre puesta en el futuro y un claro reconocimiento del impacto de la gastronomía en múltiples facetas de la sociedad moderna, Ferran Adrià continúa siendo una fuente de inspiración y liderazgo en el mundo culinario.
