Federico Martín Bahamontes, conocido como ‘El Águila de Toledo’, falleció a los 95 años de edad. El destacado ciclista toledano fue uno de los siete españoles que han logrado alzarse con el maillot amarillo del Tour de Francia a lo largo de la historia de la prestigiosa competición.
Bahamontes se convirtió en el primer ciclista español en conseguir el maillot amarillo en la edición de 1959, donde además logró en seis ocasiones el Gran Premio de la Montaña. Su dominio en las etapas de montaña y su habilidad para escaparse de los pelotones lo convirtieron en una figura legendaria en el mundo del ciclismo.
En 1963, Bahamontes consiguió la clasificación en segundo lugar y en 1964 ocupó el tercer puesto. Su destreza en la montaña y su compromiso con las escapadas lo llevaron a recibir el premio a la combatividad durante ocho días consecutivos.
La ciudad de Toledo rendirá homenaje a Bahamontes, quien en mayo de 2018 recibió un emotivo reconocimiento en un acto que contó con la presencia de grandes figuras del ciclismo español como Miguel Indurain, Carlos Sastre, Óscar Pereiro y Pedro Delgado, todos ganadores del Tour de Francia.
Durante el homenaje, Bahamontes subió desde el Paseo de la Vega hasta el Miradero en un coche descapotable, exactamente el mismo trayecto que realizó tras ganar el Tour de Francia en 1959. La ceremonia culminó con la presentación de una escultura en el Miradero, obra de Javier Molina Gil, que representa al ciclista escalando en una posición de máximo esfuerzo.
A pesar de la gratitud manifestada durante el homenaje, Bahamontes no pudo evitar bromear sobre la tardanza de este reconocimiento. «Lo que hemos tardado para estar aquí. Más que cuando me hice novio de Fermina», expresó con humor el exciclista toledano.
La partida de Federico Martín Bahamontes deja un legado imborrable en el ciclismo español, quien recordará su valentía y habilidad como un gran referente en el mundo de las dos ruedas. Su nombre permanecerá en la historia del deporte como uno de los grandes ciclistas y embajadores de Toledo. Descansa en paz, ‘El Águila de Toledo’.
