La Federación Taurina de Guadalajara ha emitido una contundente llamada a los aficionados taurinos a nivel mundial tras la reciente cancelación del Premio Nacional de Tauromaquía por parte de las autoridades. En una nota de prensa, la federación invita a los seguidores de la tradición taurina a realizar una serie de actividades que, según ellos, fomentan y conservan la cultura taurina más allá de premiaciones institucionales.
Entre las sugerencias propuestas por la Federación destacan la organización de exposiciones temáticas, la promoción de debates en espacios educativos, la lectura de literatura sobre toros, la adquisición de revistas especializadas, la creación artística inspirada por escenas taurinas y la escucha de pasodobles relacionados con las corridas de toros. Además, hacen hincapié en la importancia de incluir platos como el rabo de toro estofado en los menús de los restaurantes, la asistencia a diversos festejos taurinos, la solicitud de enseñanza de la cultura taurina en colegios, la organización de capeas y visitas a ganaderías de bravo, con el objetivo de difundir con orgullo esta cultura.
Desde la Federación afirman que, llevando a cabo estas prácticas, los aficionados podrían obtener el «verdadero premio nacional de la Tauromaquia», definido como el privilegio de disfrutar y transmitir los valores taurinos a futuras generaciones. Destacan además que ese premio intrínseco es insustituible y no puede ser arrebatado por ninguna figura política.
La Federación Taurina de Guadalajara también aprovecha para criticar lo que considera una negligencia por parte de algunos políticos en el manejo y apoyo a la cultura taurina, remarcando que premios como el ahora suprimido no surgen por casualidad, así como tampoco el reconocimiento de una práctica cultural como Bien de Interés Cultural, apuntando al profundo arraigo histórico que tiene la Tauromaquia en España.
Finalmente, la nota hace hincapié en la dimensión cultural de los toros, su capacidad de unir a las personas y generar riqueza, especialmente en las zonas donde más se necesita. Enfatizan la autenticidad de las corridas de toros en un contexto de proliferación de noticias falsas, así como su capacidad para revivir los pueblos y valores positivos, promoviendo una igualdad genuina. Concluyen subrayando que la cultura taurina, siendo de nadie en particular, es accesible a todos los que se acerquen a ella con respeto y pasión, y afirman su compromiso de nunca abandonarla.
