Las familias juegan un rol fundamental en la prevención y detección de la ciberviolencia que afecta a adolescentes, según señaló Andrés Carmona, director del programa ‘Click’ de la asociación Punto Omega. Durante un taller de prevención de la adicción a las nuevas tecnologías y uso responsable de internet, desarrollado en el Colegio Público de Educación Especial de Toledo y visitado por la consejera de Igualdad, Sara Simón, Carmona enfatizó la importancia del acompañamiento familiar en el uso seguro de Internet por parte de los jóvenes.
Los talleres están diseñados para educar a alumnos de diferentes etapas educativas, así como a sus familias y profesores, sobre cómo identificar y afrontar situaciones de violencia online a través de redes sociales y videojuegos. Carmona resaltó que los jóvenes pueden exponerse a riesgos y hacer usos indebidos de las tecnologías, por lo que es vital enseñarles a contrarrestar mensajes negativos y a utilizar internet de manera responsable.
A pesar de la relevancia de estos programas de formación, Carmona admitió que la participación familiar no siempre es la esperada. Aún así, destacó la involucración creciente de los centros educativos en el compromiso de las familias, como se demostró con la convocatoria de 20 familias en un reciente evento que describió como meritorio.
La asociación Punto Omega, apoyada por el Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha, ha llevado a cabo cerca de 350 talleres a lo largo de este año, evidenciando la creciente demanda de esta intervención en la región.
Además, Sara Simón, consejera de Igualdad, subrayó los riesgos presentes en Internet y en las redes sociales, que aparte de ser herramientas de progreso y colaboración, también han abierto puertas a nuevas formas de violencia y acoso, especialmente contra mujeres. Según datos del Gobierno de España, un 25% de las mujeres entre 16 y 25 años han experimentado comportamientos inapropiados en estos espacios digitales, y un tercio de los casos de acoso sexual ocurren online.
Simón hizo un llamado a la acción colectiva para erradicar este tipo de violencia y agradeció a organizaciones como Punto Omega su colaboración con el Gobierno regional en la lucha por una sociedad más igualitaria. Sin embargo, admitió que su consejería aún no dispone de estadísticas propias para evaluar los efectos específicos de la ciberviolencia en la región, aunque está consciente de la necesidad de desarrollar herramientas para obtener esos datos.