1.200 falsos cooperativas y falsos autónomos fueron regularizados por las empresas cárnicas durante el último año en Castilla-La Mancha. Estos cooperativas y autónomos ahora trabajan como asalariados y se encuentran amparados por el convenio colectivo del sector. Además también se encuentran de alta dentro del régimen general de Seguridad Social. Tal como ha informado, el secretario general de CCOO-Industria CLM, Ángel León, “La batalla en solitario de CCOO rinde frutos y está consiguiendo erradicar el fraude laboral y social de un sector capital para la economía y el empleo de CLM y de España”.
De enorme importancia es la industria cárnica por cuanto es el cuarto sector industrial del país, solo por detrás de las industrias automovilística, la del petróleo y combustibles y la producción y distribución de energía eléctrica. En nuestra región, tiene un peso especialmente importante, tanto por su aportación al PIB como por el volumen de empleo que mantiene.
Según consta en los datos que maneja la EPA, las actividades de procesado y conservación de carne y elaboración de productos cárnicos (CNAE 10.1) ocupaban en el segundo trimestre de este año a 9.900 personas en CLM. De cada mil ocupados de la región, más de 12 trabajan en el centenar de empresas cárnicas que hay en CLM, de las que destacan Incarlopsa y Frivall en la provincia de Cuenca, Frimancha en Ciudad Real y Tello en Toledo.
El 8.245 (el 83,28%) de las 9,900 personas ocupadas, son asalariadas afiliadas al régimen general de la Seguridad Social. Durante el segundo trimestre del año pasado, había 9.100 personas ocupadas en el sector cárnico y solo 6.501 (el 71,44%) estaban de alta en el régimen general.
“¿Qué ha pasado en este periodo? Que la acción sindical de CCOO y las actuaciones de la Inspección de Trabajo han permitido la regularización de falsos autónomos como trabajadores asalariados, bien en la empresa principal o en una empresa subcontratada. En el conjunto del país se han regularizado ya más de 19.000 falsos cooperativistas y falsos autónomos del sector cárnico. De estos, en torno a 1.300 estaban encuadrados en empresas radicadas en CLM: unos 700, en la provincia de Cuenca; más de 500 en la de Toledo, cerca de otro centenar, en Ciudad Real”, explica Ángel León.
“Estamos consiguiendo extirpar de las empresas cárnicas el cáncer laboral que suponía la presencia en el sector de falsas cooperativas de trabajo asociado.
Hace apenas año y medio, en febrero de 2018, cifrábamos en más del 30% el volumen de empleo ocupado por falsos autónomos en la industria cárnica de la región; ahora apenas quedan medio millar. Y no vamos a parar hasta lograr erradicar este fraude laboral y social que durante muchos años ha sido práctica habitual en el sector; hasta el punto de que para muchas empresas era imposible competir y sobrevivir sin sucumbir en el mismo fraude que las demás.”
El grupo Tello, que había ido incorporando falsos autónomos a sus centros de trabajo en los últimos años, en gran medida forzado por la competencia desleal imperante en el sector, ha regularizado ya a buena parte de ellos y ha acordado con el comité de empresa culminar el proceso este año. “Ahora, Tello figura ya con luz verde en el ‘Semáforo laboral cárnico’ de CCOO. Hay que resaltar también la buena disposición de Incarlopsa para dar el paso de la cooperativa al régimen general. Pero hay que lamentar y criticar la posición del grupo Valls Companys, que sigue mostrándose reticente a regularizar a los falsos cooperativistas con los que sigue contando en muchos de sus centros de trabajo, incluidos el de Frivall, en Villar de Olalla (Cuenca) y el Frimancha, en Valdepeñas (Ciudad Real).”
CCOO lleva mucho tiempo denunciando y combatiendo la presencia de falsas cooperativas en el sector cárnico. Ya en febrero del año 2000, el sindicato promovió una huelga en el matadero de Sada de Lominchar (Toledo. En aquel entonces, Sada contaba en Lominchar con 100 trabajadores directos y 200 falsos cooperativistas de Servicarne, y quería seguir incrementando esta cifra con cincuenta más.
Por primera vez en la historia, la convocatoria de la huelga fue respaldada tanto por los trabajadores de plantilla como por los falsos autónomos, los “cooperativistas de trabajo asociado”. La empresa evitó finalmente los paros aceptando incorporar a la plantilla directa a los 50 nuevos trabajadores y comprometiéndose a no aumentar durante un año el volumen de empleo subcontratado con Servicarne.
Desde entonces, CCOO ha mantenido una larga y difícil batalla sindical contra la presencia de falsos cooperativistas en la industria cárnica y se han sucedido las denuncias del sindicato ante la Inspección de Trabajo. Así sucedió por ejemplo en 2014, cuando Frimancha pretendió despedir gratis a 60 falsos cooperativistas obligándoles a firmar la baja voluntaria como ‘socios’ de Servicarne.
En junio de 2016, la extensión del fraude laboral había llegado al punto de alarmar incluso a las propias patronales del sector. ANICE, FECIC, ANAGRASA, ANAFRIC y APROSA emitieron un comunicado conjunto con CCOO y UGT “en defensa del convenio colectivo de Industrias Cárnicas y de unas condiciones dignas para todos los trabajadores de la industria cárnica.” En el comunicado, las organizaciones empresariales cárnicas y los sindicatos se comprometían a “estudiar medidas que disuadan de utilizar las cooperativas de trabajo asociado (…) por ser un fraude a la seguridad social y un factor de competencia desleal entre las empresas, al no respetar las condiciones mínimas pactadas en el convenio colectivo.”
El comunicado conjunto se quedó en la intención. El falso cooperativismo como herramienta de las empresas para la flexibilidad laboral ilimitada, el ahorro de costes salariales y el fraude a la Seguridad Social, siguió extendiéndose como una gangrena imparable en la industria cárnica. Pero CCOO intensificó la lucha en solitario. El congreso estatal de CCOO-Industria, celebrado en Toledo los días 18,19 y 20 de abril de 2017, la incluyó entre los objetivos centrales de esta federación del sindicato; y la propia confederación sindical de CCOO la hizo suya.
La coordinación de la acción sindical -la confrontación directa con las empresas fraudulentas con huelgas, paros, movilizaciones y manifestaciones en los centros de trabajo gangrenados-; la jurídica -la insistente presentación ante las inspecciones de trabajo de denuncias sólidamente fundadas-; la institucional -la secretaria de Empleo, la talaverana Lola Santillana, y José Vicente Canet, responsable estatal de Industria Alimentaria, intensificaron los contactos con el Ministerio (de Empleo en el Gobierno Rajoy, de Trabajo en el de Sánchez) y con la Inspección de Trabajo para exigir la persecución del fraude y la descalificación de las falsas cooperativas-; e incluso la mediática -con la denuncia pública contante, con la difusión por todos los medios, soportes y redes, del hashtag #CarneSinFraude, con la puesta en marcha del ‘Semáforo Laboral Cárnico… “están dando frutos. El fraude de los falsos autónomos está en franco retroceso”
Durante el último año, se han multiplicado las actas de Inspección en las que se constata la existencia de fraude y se ordena a las empresas la regularización de los falsos autónomos. El pasado mes de mayo, la dirección general de Trabajo Autónomo y Economía Social del Ministerio de Trabajo descalificó a Servicarne, tal y como había propuesto la Inspección de Trabajo a instancias de CCOO. Servicarne, fundada en 1977, era la precursora y la mayor falsa cooperativa de las que operaban en el sector: en 2018 disponía de 5.300 socios cooperativistas y ahora quedan unos 1.000.
Antes, en abril, se disolvió la Agrupación de Desarrollo Agropecuario, al no resistir la presión de la campaña de CCOO contra las falsas cooperativas. ADA proporcionaba mano de obra barata a la industria cárnica hasta que la Inspección de Trabajo levantó un acta de infracción muy grave por incumplir las normas laborales, tras la denuncia de CCOO.
También en mayo, tras un largo proceso de presión y de denuncia sindical, novecientos falsos autónomos se incorporaron a UVESA. El Grupo Jorge incorporó a su plantilla a las 1.600 personas que habían dejado de ser falsos autónomos. La huelga y la posterior concentración sindical en La Bañeza ante las puertas de Embutidos Rodríguez logró que la empresa regularizara a más de 400 falsos autónomos y falsos cooperativistas, además de readmitir a los 26 trabajadores a los que había despedido durante este conflicto.
A la concentración de La Bañeza acudieron cincuenta delegados sindicales de CCOO de empresas cárnicas de CLM. Un mes antes, el pasado 11 de abril, el sindicato también se movilizó en la región con concentraciones simultáneas ante Sada, Frimancha y Frivall. Estas dos empresas ya se habían sumado en noviembre del año anterior a la huelga convocada por CCOO en todo el Grupo Vall Companys.
En paralelo a todo esto, la tesorería de la Seguridad Social ha emprendido de oficio una demanda para que se declare la naturaleza de verdadera relación laboral la existente entre los ‘cooperativistas de trabajo asociado’ de Servicarne con las empresas cárnicas en las que venían trabajando como falsos cooperativistas.
Por este motivo han sido citados cerca de 1.400 trabajadores (falsos autónomos) de Castilla-La Mancha a comparecer en el citado proceso judicial, que está señalado a finales de año y que afecta a unas cien personas provenientes de Sada-Lominchar; otras 450 de Frimancha y 800 de Frivall.
“Aquí queda ganar la batalla judicial al objeto de que ninguna empresa del sector vuelva a utilizar fraudulentamente falsos autónomos y falsos cooperativistas. Una batalla cuyo resultado tendrá, además, importantes repercusiones sobre otros sectores afectados por las mismas prácticas fraudulentas”, concluye León.