La Inspección de Trabajo ha ratificado la denuncia interpuesta por Comisiones Obreras a Geacam después de que la empresa no incluyera la exposición a agentes tóxicos y cancerígenos en la evaluación de riesgos de los bomberos forestales.
Ha sido a través de un informe realizado por la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Toledo, que haciendo alusión a la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, así como a estudios realizados por el Ministerio de Transición Ecológica, reconoce la existencia de agentes tóxicos en el humo de los incendios forestales, tales como los hidrocarburos policíclicos y compuestos orgánicos volátiles, que podrían «llegar a ser potencialmente peligrosos para la salud».
Además, el documento también indica que en un incendio forestal no solo se generan emisiones de agentes químicos, sino también material sólido como cenizas y hollín. Elementos que se dan igualmente en una combustión o quema de material forestal a la que están expuestos los integrantes del SEIF, incluidos técnicos, agentes medioambientales e ingenieros de la Junta.
Por todo ello, desde CCOO llevan «décadas» pidiendo a Geacam que instale lavadoras en los 103 centros que tienen en Castilla-La Mancha, compromiso que la empresa no ha cumplido todavía. Del mismo lado, exigen que se elaboren protocolos de prevención que tengan en cuenta la existencia de todos estos agentes tóxicos.
«Buscamos soluciones, hemos propuesto poner lavadoras porque los bomberos forestales después de los incendios tenemos que llevarnos a nuestras casas todo el equipo contaminado, esto no puede ser así, necesitamos poder ir al centro de trabajo, lavar los equipos y poder ducharnos y quitarnos las cenizas y el hollín», ha aseverado en rueda de prensa el presidente del Comité Intercentros de Geacam, Manuel Amores, que también ha pedido que se proporcione a los profesionales más equipos.
«Necesitamos que los trabajadores tengan dos o tres trajes de protección, en los incendios que duran un día no hay problema, pero tenemos incendios de tres o cinco días e incluso semanas, esto nos obliga a usar el mismo equipo siempre, sin descontaminar y llevándonoslo a casa», ha reprochado.
Amores ha criticado a la empresa por alegar que lavarían los equipos al finalizar cada campaña. «Es decir, han dicho que lavan los equipos después de una campaña de cuatro meses con 12 o 13 incendios».
Desde el sindicato piden a Geacam que siga el ejemplo de Andalucía, donde ya incluyeron este tema en la evaluación de riesgos y lo modificaron.
Además, piden incluir en el Estatuto del Bombero Forestal estos problemas, ya que lo consideran «descafeinado». «Tienen que tomarse medidas acordes a las situaciones que vivimos, todos los bomberos forestales de España debemos tener los mismos derechos porque cuando vamos a apagar un incendio, los tóxicos no entienden de límites geográficos», ha reiterado.
Por su parte, el presidente del Comité Intercentros Salud Laboral de Geacam, Paco Villarta, ha agradecido el trabajo de la Inspección, detallando cómo fue el proceso para conseguir el informe.
«En el año 2017 los delegados de prevención ya solicitamos una evaluación de riesgos, pero la empresa argumentó que no existían tales peligros a través de una medición que hizo en quema de montones, un estudio que hicieron sin contar con la representación sindical y que desde la Inspección de Trabajo han descalificado», ha explicado.
Villarta ha señalado que consiguieron que la empresa pusiera lavadoras, pero solo en 20 centros, por ello insisten en que se adecuen las estancias para su instalación en todos los centros, así como duchas.
Asimismo, ha hecho un llamamiento al nuevo viceconsejero de Medio Ambiente, Pepe Almodóvar, para «elaborar un procedimiento de descontaminación dialogado» de cara a la próxima campaña de incendios.
«Desde CCOO obligaremos a Geacam a realizar una comisión de los riesgos y a aplicar los reales decretos sobre químicos y cancerígenos que han estado incumpliendo», ha finalizado.