Los recientes análisis realizados en varios laboratorios extranjeros confirman que Alexéi Navalni, líder opositor ruso fallecido, fue envenenado durante su tiempo en prisión, según ha declarado su viuda, Yulia Naválnaya. La confirmación se basa en material biológico que fueron capaces de transportar al extranjero, donde laboratorios de dos países diferentes llegaron a la misma conclusión sobre el envenenamiento de Navalni. Residente actualmente en Alemania, Naválnaya reclama la importancia de hacer públicos estos resultados, advirtiendo que «todos merecemos conocer la verdad».
Naválnaya también ha compartido un emotivo video en el que expresa que su marido fue víctima de un atentado y que su muerte, ocurrida en febrero de 2024, fue consecuencia de un sistema que buscaba no solo eliminarlo físicamente, sino también quebrantar su espíritu. El relato incluye detalles inquietantes sobre sus condiciones carcelarias, incluida la falta de atención médica adecuada cuando Navalni comenzó a mostrar signos de malestar.
A pesar de las alegaciones y la presión internacional, las autoridades rusas mantienen su versión oficial sobre la muerte de Navalni, atribuyéndola a una arritmia. Recientemente, un tribunal ruso rechazó la solicitud de la madre de Navalni para abrir una investigación por asesinato, desestimando las demandas de justicia de su familia y reforzando las sospechas sobre las circunstancias que rodean su trágico final.
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