La compañía ferroviaria se convierte en el primer socio no aéreo de SkyTeam, facilitando los viajes combinados de tren y avión
Desde el próximo año, Eurostar formará parte de la alianza de aerolíneas SkyTeam, la misma a la que pertenece Air Europa, marcando un hito al convertirse en el primer socio de la alianza que no es una aerolínea. Este movimiento busca facilitar los desplazamientos a los pasajeros de aerolíneas como Air France y Virgin Atlantic, que operan en los destinos conectados por los trenes de Eurostar entre París, Bruselas y Londres.
En la práctica, esto implica la posibilidad de comprar un billete único que combine trayectos en tren y avión, ofreciendo una mayor comodidad a los viajeros de larga distancia. Este tipo de colaboración permite, por ejemplo, que un pasajero que aterrice en Londres Heathrow o París Charles de Gaulle pueda tomar un tren de Eurostar con el mismo billete, lo que simplifica la logística y reduce el estrés de los trasbordos entre distintos medios de transporte.
Un paso más en la integración del transporte europeo
Esta integración no es un asunto menor, ya que alrededor del 13% de los pasajeros de Eurostar provienen de vuelos de larga distancia, utilizando el tren como parte de su trayecto para conectar con otros destinos europeos. La posibilidad de operar con un billete único representa un avance significativo para los viajeros que buscan una experiencia más fluida y eficiente. Aeropuertos como Charles de Gaulle, Heathrow o Schiphol, aunque en menor medida, se beneficiarán de esta conexión ferroviaria integrada, reforzando sus enlaces con el centro de Londres, Bruselas y París.
En Francia, la SNCF, equivalente local de Renfe, ya cuenta con un programa que permite a los usuarios comprar billetes combinados de tren y avión, facilitando el viaje a aquellos que necesitan trasladarse entre distintos puntos del país o del continente.
Beneficios para los pasajeros y el futuro del transporte multimodal
La inclusión de Eurostar en SkyTeam representa un impulso hacia la multimodalidad en el transporte, un concepto cada vez más relevante en Europa. Los viajeros no solo disfrutarán de una mayor comodidad gracias al billete único, sino también de la acumulación de puntos de fidelidad, lo que incentiva el uso de alternativas sostenibles como el tren para los desplazamientos cortos y medios dentro de Europa. Esta colaboración fortalece la conexión entre las principales ciudades europeas y aporta una opción más atractiva frente al uso del automóvil o los vuelos cortos.
Con iniciativas como esta, se sigue apostando por una integración más profunda de los diferentes modos de transporte en Europa, con el objetivo de mejorar la eficiencia y reducir el impacto ambiental. La colaboración entre trenes y aerolíneas, más allá de los acuerdos comerciales, supone una mejora directa en la experiencia del usuario y ofrece una solución más coherente con las necesidades actuales de movilidad sostenible.
