En una firme manifestación de solidaridad, la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de las Universidades Públicas (CREUP) ha elevado su voz contra lo que describe como “violentas actuaciones” hacia el estudiantado en Bangladesh, lanzando un llamado a que cesen de inmediato las “represiones y persecuciones” que se han cobrado la vida de varios estudiantes en el país asiático.
Este pronunciamiento ocurre tras las protestas iniciadas a principios de julio por un grupo de alumnos de la Universidad de Dacca. La movilización, que rápidamente ganó la adherencia de estudiantes de otras instituciones, criticaba el polémico sistema de cuotas en la asignación de puestos en la administración pública. Dicho sistema, según los manifestantes, favorece injustamente a ciertos grupos sin tomar en cuenta los méritos individuales, marginando a los estudiantes más desfavorecidos y a las personas con discapacidad.
El conflicto desencadenó una dura respuesta por parte de las fuerzas policiales y militares en Bangladesh, con un saldo alarmante de fallecidos y lesionados entre el estudiantado. CREUP condena enérgicamente estas acciones, subrayando que “en ningún caso la libertad de expresión del estudiantado debe ser vulnerada de esa manera”. Además, califica de “desmesurada” la reacción gubernamental frente a las manifestaciones, denunciando que el gobierno de Bangladesh “tiene las manos manchadas de sangre” por estos lamentables sucesos.
En una nota positiva, CREUP destaca que las protestas han logrado un cambio significativo, con la Corte Suprema de Bangladesh estableciendo que el 93% de los puestos deben asignarse basándose en méritos. Sin embargo, la entidad considera que este avance es aún “insuficiente” y demanda que se llegue al objetivo final donde el 100% de los puestos correspondan a evaluaciones mérito-cráticas.
El colectivo estudiantil español aprovechó para recordar a las autoridades de las comunidades autónomas del estado español que la Ley Orgánica del Sistema Universitario reconoce el paro académico del estudiantado. En este sentido, advierten que dicho derecho no debe ser vulnerado, haciendo un paralelismo con los eventos en Bangladesh como un ejemplo extremo de lo que no debería suceder.
La situación en Bangladesh ha generado una ola de atención internacional, subrayando la importancia de salvaguardar los derechos educativos y de manifestación de los estudiantes alrededor del mundo. Este llamado de CREUP refleja el creciente clamor por una educación más inclusiva y justa, libre de represiones y discriminaciones basadas en sistemas de cuotas arcaicos que no reflejan las capacidades y méritos individuales.