Este miércoles, la Policía de Escocia ha detenido al marido de la ex ministra principal Nicola Sturgeon, Peter Murrell, en relación con una investigación sobre presuntas irregularidades en el Partido Nacional Escocés (SNP). La noticia no sólo ha sorprendido a los ciudadanos escoceses, sino también a la comunidad política y mediática de todo el Reino Unido.
Murrell, que también es el director ejecutivo del SNP, fue arrestado en su domicilio en Glasgow y posteriormente conducido a una comisaría para ser interrogado. Según la Policía de Escocia, la operación policial también ha incluido varios registros en propiedades en los alrededores de Glasgow, aunque no han dado detalles sobre las mismas.
Este caso se produce después de que un tribunal escocés anulara recientemente una decisión del Parlamento escocés en la que se acusaba a Sturgeon de mentir al respecto de su conocimiento de una investigación interna sobre el acoso sexual perpetrado por el ex ministro de Finanzas del SNP, Alex Salmond. Salmond, que fue declarado inocente en un juicio por estos cargos en 2020, ha acusado a Sturgeon de haber “violado el código de conducta ministerial” y de estar involucrada en una conspiración contra él.
La situación política en Escocia se ha vuelto cada vez más tensa en los últimos años, con el SNP liderando una campaña para la independencia de Escocia del Reino Unido. Esta campaña ganó fuerza después de que en el referéndum sobre la independencia de Escocia de 2014, el 55% de los votantes escoceses optaron por la opción de permanecer en el Reino Unido.
A pesar de que Sturgeon se ha comprometido a convocar un nuevo referéndum sobre la independencia de Escocia antes de 2023, el gobierno británico liderado por Boris Johnson ha rechazado esta posibilidad y ha señalado que la unidad del Reino Unido es una prioridad. Esta postura ha aumentado la tensión entre el gobierno británico y el SNP, que ha acusado al gobierno de Westminster de desatender los intereses de Escocia y de resistirse a un referéndum desde el miedo a perderlo.
El arresto de Murrell en el marco de una investigación sobre presuntas irregularidades en el SNP es una noticia preocupante para los ciudadanos escoceses, que ven cómo los líderes políticos del país están cada vez más envueltos en escándalos y conflictos internos. Además, se teme que este caso pueda afectar a la imagen y la credibilidad del SNP, que ha sido durante años el principal partido político de Escocia y que ha liderado la lucha contra el Brexit y la independencia del país.
En cualquier caso, es importante subrayar que la presunción de inocencia y el derecho a un juicio justo son valores fundamentales del sistema legal y político del Reino Unido. Por lo tanto, es necesario esperar a que la investigación avance y se esclarezcan los hechos antes de sacar cualquier conclusión. De momento, la detención de Murrell y los registros en varios domicilios en Glasgow son noticias muy graves que añaden más incertidumbre e inestabilidad a la política escocesa.
