La concejala de Obras y Servicios Públicos Medioambientales, Noelia de la Cruz, ha asegurado que el equipo de Gobierno trabaja desde que se inició la legislatura por optimizar y mejorar el Plan de Control de Vertidos de la ciudad incrementando la frecuencia de las inspecciones a las empresas que vierten sus fluentes industriales al río, y aumentando el control y la medición de los parámetros que entran a la depuradora para mejorar el tratamiento de los vertidos.
La responsable municipal, que ha realizado estas declaraciones tras conocer la carta que la Plataforma en Defensa del Tajo ha remitido este miércoles, ha agradecido los esfuerzos de todos los colectivos que trabajan y luchan por la defensa del río aunque ha querido dejar claro que desde el Gobierno local no admiten “su exclusividad ni el carácter oportunista”.
En este sentido, Noelia de la Cruz ha explicado que “no se debe excluir a nadie en la defensa del Tajo sino aunar esfuerzos para lograr mejores resultados por y para el río”. De ahí, que naciera el Consejo del Pacto por el Tajo, uno de los primeros objetivos de la alcaldesa, ha explicado, para implicar a toda la sociedad toledana y a sus principales entidades sociales en la defensa del patrimonio medioambiental más importante de la ciudad.
Tal y como ha insistido la concejala de Obras y Servicios Públicos Medioambientales, el Consistorio toledano hace “esfuerzos diarios” para cumplir con las autorizaciones de vertidos de la Confederación Hidrográfica del Tajo y para controlar que todos los usuarios de la red de saneamiento de la zona industrial viertan de manera correcta y sus depuradoras industriales funcionen adecuadamente.
Aumenta el control y las mediciones
Para ello, se han incrementado, por un lado, la frecuencia de las inspecciones a todos los usuarios de la red de saneamiento a la hora de descargar sus fluentes industriales a la depuradora para garantizar los cumplimientos de los condicionantes de vertido que tienen estas empresas, y por otro, se ha aumentado la frecuencia en el control y la medición en los parámetros que entran a la depuradora para mejorar y optimizar el tratamiento de los vertidos y de depuración.
La edil ha explicado que se pueden producir desajustes puntuales en un tratamiento de depuración concreto, pero que “no son motivo para generalizar o acusar a nuestras instalaciones de contaminantes con respecto al río Tajo”. Así, ha añadido que se trata de “un equilibrio muy delicado que intentamos mantener, como todos los usuarios de la cuenca, en las mejores condiciones, para cumplir nuestras autorizaciones de vertido”.
Además, la responsable municipal de Servicios Públicos Medioambientales ha recordado que “no se puede confundir lo que visualmente puede parecer contaminación, con lo que es una clara diferencia de tonalidad en la confluencia de dos masas de agua que se juntan a la salida del efluente de la depuradora, siendo una de las masas la de la depuradora y otra la del propio río”.
Por último, Noelia de la Cruz ha lamentado la mezcolanza que la Plataforma ha plasmado en su escrito ligando el futuro del río con el ataque a proyectos que mejorarán la economía local “a los que parece que se oponen” cuando el único objetivo de este equipo de Gobierno es la preservación del río Tajo y su compatibilidad con el desarrollo de la capital regional.