Este martes, el plató de «El Hormiguero» se convirtió en un escenario donde la risa y la reflexión se entrelazaron de la mano del chef José Andrés. Con su energía contagiosa y su carácter afable, Andrés compartió anécdotas de su trayectoria y, al mismo tiempo, se adentró en cuestiones de gran calado que marcan la actualidad.

Imbuido en la conversación con Pablo Motos, el chef no solo recibió agradecimientos por su labor humanitaria durante la reciente DANA en Valencia sino que también se vio obligado a confrontar un tema doloroso y complejo. El asesinato de siete de sus voluntarios en Gaza, mientras ofrecían apoyo humanitario, fue una herida abierta que Andrés no dudó en abordar. “Ese episodio marcó un antes y un después en mi vida”, contó con sinceridad, antes de sentar su posición sobre el conflicto que asola a la región.

Desde el ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre, el chef se vio empujado a actuar rápidamente. «El ataque fue realmente horrendo», expresó, recordando cómo su equipo comenzó a proporcionar alimentos en Israel apenas un día después. Sin embargo, lo que sorprendió a muchos fue su decisión de operar también en Gaza. «Estábamos allí, al día siguiente de que comenzara la ofensiva», subrayó. Sorprendido por las críticas que recibió por su postura, Andrés defendió su enfoque humanitario: “Estamos del lado de la humanidad”, afirmó.

En su alegato moral, el chef insistió en que la responsabilidad no debe recaer sobre los inocentes. “Los hechos de unos pocos no pueden manchar a la mayoría”, sentenció, destacando que “no se puede etiquetar a todos los palestinos o musulmanes por las acciones de un grupo terrorista”. Su llamada a la humanidad se extiende más allá de las divisiones geográficas y políticas, pidiendo a todos que se unieran en la lucha contra el sufrimiento.

Además, el chef criticó la respuesta de Israel a la crisis en Gaza, pero hizo una clara distinción: la culpa no debería ser un estigma colectivo. “La responsabilidad es de los líderes, no de la gente”, insistió, refiriéndose a figuras como el presidente Netanyahu. Para Andrés, quedarse en el juego de alianzas políticas es un lujo que no se pueden permitir quienes priorizan la vida humana.

Su discurso, firme y claro, desafió la tendencia a la polarización que caracteriza el debate público contemporáneo. “Estoy a favor de los palestinos y de los israelíes. Estoy a favor de la gente de bien”, declaró, propugnando que la verdadera batalla es contra el odio y el sufrimiento que sufren las personas. Con una frase poderosa, concluyó: “La humanidad es la que tiene que ganar cada día. Y eso se logra a través de la comida”.

La aparición de José Andrés en «El Hormiguero» no solo fue un recordatorio de la importancia de la acción humanitaria en tiempos de crisis, sino también un llamado a ver más allá de las divisiones y a crear puentes donde a menudo se levantan muros. En tiempos de desesperanza, su voz resonó como un fuerte eco de empatía y compromiso.

Scroll al inicio
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.