El miércoles 24 de septiembre fue una fecha significativa en la televisión española. Melody, la famosa cantante que ha navegado por las aguas del éxito desde su debut como niña prodigio, visitó el plató de «Y ahora Sonsoles», conducido por Sonsoles Ónega. Este encuentro, esperado con ansias por la audiencia, marcó el cierre de una polémica que había rodeado a la artista tras su participación en Eurovisión 2025.
Durante la conversación, Sonsoles no pudo evitar recordar la crítica de Melody sobre la insistencia del programa en discutir los conflictos relacionados con su regreso a la televisión. Sin embargo, el ambiente se tornó en uno de reconciliación, culminando en un emotivo abrazo y un sincero diálogo entre ambas.
Melody, emocionada, recordó cómo el amor y el apoyo de su familia han sido fundamentales en su vida y su carrera. A través de sus palabras, se podía sentir la gratitud hacia un público que la ha acompañado durante sus 25 años en la industria musical. “El calor y el amor del público es la mayor bendición que uno puede tener”, expresó, reflexionando sobre su trayectoria y los desafíos que enfrentó desde su debut como artista infantil.
“Si volviese atrás, me gustaría hacer lo mismo. He sido una niña muy feliz”, relató, compartiendo su deseo de que su hijo encuentre su propia pasión, aunque le aconsejaría tener un plan alternativo. “La música es muy sacrificada. Lo importante es que sea feliz”, señaló.
La entrevista fluyó hacia momentos más personales, donde Melody admitió estar más emocional que nunca, especialmente tras su reciente rol como madre. La cantante expresó cómo valora cada instante junto a su familia y cómo esa conexión se ve reforzada en cada actuación, donde la presencia de los más pequeños resuena intensamente en su corazón.
Uno de los momentos más conmovedores de la tarde llegó cuando se emitieron imágenes de su tía recientemente fallecida. Melody, visiblemente afectada, no pudo contener las lágrimas. “Al final me habéis hecho llorar”, dijo entre sollozos, dejando palpable su lado más humano ante la audiencia. “Melody es así, soy una persona muy familiar”, añadió, recordando la importancia de la familia en su vida.
La presentadora no se detuvo y abordó sin rodeos la controversial aparición de Melody en Eurovisión. Tras el tumulto mediático, la artista se defendió, señalando que su vida es mucho más que ese evento. “Nunca va a llover a gusto de todo el mundo. Necesitaba llegar a mi casa y estar con mi familia”, comentó, dejando claro que su carrera musical sigue adelante y que su futuro incluye nuevos proyectos, como su papel como asesora en “La Voz Kids”.
Melody concluyó con una reafirmación de su vocación. “Me dedico a cantar y a llenar vuestras casas de música y baile”, afirmó, al tiempo que anticipó emocionadamente su próximo disco, el primero en diez años. Esta visita al programa no solo sirvió para aclarar malentendidos, sino que también destacó la resiliencia y autenticidad de una artista que sigue emocionando al público tras más de dos décadas en el escenario.
