Ciudad Real respira balonmano durante todo el año, y lo hace de manera especial en el mes de mayo, cuando los equipos de la ciudad se preparan para disputar los últimos partidos en busca de alcanzar sus objetivos. Uno de los equipos destacados en este ámbito es el Balonmano Caserío, que este fin de semana está siendo el anfitrión de uno de los grupos de la Fase de Ascenso a División de Honor Plata.
El conjunto manchego inició su participación en esta fase con una ajustada derrota por 26-27 ante el equipo de Granollers. A pesar de este resultado, las jugadoras del Balonmano Caserío demostraron su compromiso y garra sobre la pista, dejando todo en cada encuentro.
El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, ha querido mostrar su apoyo a todos los equipos participantes en esta fase de ascenso, con un especial deseo de suerte para las jugadoras del Balonmano Caserío. En la primera jornada, el equipo cayó derrotado por solo un gol, mostrando su capacidad y talento en cada partido.
Además de la competición en sí, se ha llevado a cabo una recepción oficial a los equipos participantes en el grupo D de la Fase de Ascenso. Este acto protocolario tuvo lugar en el emblemático pabellón Quijote Arena, conocido como uno de los templos del balonmano español.
Tras el enfrentamiento contra Granollers, el Balonmano Caserío tiene programados otros dos encuentros en esta fase de ascenso. El sábado se enfrentarán a EMD Aceuchal a las 19:30 y cerrarán la fase el domingo frente a Benalmádena a partir de las 12:30, ambos partidos se disputarán en el Quijote Arena.
La presencia de autoridades como el concejal de Deportes, Pau Beltrán, y la vicepresidenta de la Diputación Provincial, Milagros Calahorra, junto al presidente del Balonmano Caserío, Julián Amores, resalta la importancia y el apoyo institucional a este deporte en la ciudad de Ciudad Real. Además, la presencia de representantes de los distintos equipos participantes refleja el ambiente de compañerismo y competición sana que se vive en cada encuentro.
En definitiva, el balonmano sigue siendo parte fundamental de la vida deportiva de Ciudad Real, mostrando la pasión y dedicación de sus equipos en cada encuentro. El Balonmano Caserío y el resto de equipos participantes en esta fase de ascenso son un claro ejemplo del talento y la entrega que se vive en este deporte, haciendo de cada partido una auténtica fiesta para los amantes de esta disciplina.
