La profesora toledana Ángela Sánchez-Pérez, conocida por su campaña contra el uso de teléfonos móviles por los menores, continúa su lucha al llevar su causa al Congreso de los Diputados. Este martes, Sánchez-Pérez ha tenido la oportunidad de reunirse con miembros del PSOE, Partido Popular, Vox, Junts y EH Bildu para exponer los efectos negativos que, según ella, los teléfonos móviles tienen sobre los niños en el ámbito educativo.
Sánchez-Pérez, que ya ha recopilado más de 80,000 firmas a través de un movimiento iniciado en change.org, ha explicado a los medios antes de las reuniones: «Hemos despertado un debate social. Me voy a sentar con ellos como personas de tú a tú y contarles la realidad de los centros educativos». La profesora destaca la problemática del «déficit severo de atención» que, según afirma, provoca la utilización de estos dispositivos, afectando directamente la capacidad de los niños para concentrarse y comprender materias esenciales como Lengua y Matemáticas.
Además de los problemas de atención y aprendizaje, Sánchez-Pérez subraya el grave problema del ciberacoso. El acoso que comienza en el colegio no se detiene al llegar a casa, ya que puede continuarse a través de los dispositivos móviles. La consecuencia de esto puede llegar hasta depresiones graves, apatía, enfermedades mentales y, en casos extremos, el suicidio.
La iniciativa de la profesora no solo representa su voz, sino también la de 678 profesionales del ámbito educativo de toda España y de todas aquellas personas que han firmado la petición, interesadas en saber qué acciones tomarán los políticos ante esta situación.
Las reuniones de Sánchez-Pérez con los diputados, entre los que se encuentran miembros tanto de partidos de izquierda como de derecha, son un punto clave en su esfuerzo por regular el uso de móviles por parte de los menores. En la lista de políticos con los que se ha reunido se incluyen María Luisa García Gurrutxaga, Mari Luz Martínez e Isabel Moreno del PSOE; Sandra Moneo, Noelia Nuñez, Oscar Clavel, Miguel Ángel Sastre Uyá y Jaime Miguel de los Santos del PP; Joaquín Robles López de Vox; Marije Fullaondo e Isabel Pozueta de EH Bildu; y Pilar Calvo de Junts.
En paralelo a la iniciativa de Sánchez-Pérez, Natalia Jiménez, madre y profesora de Secundaria, también ha promovido una campaña que busca la prohibición del uso de teléfonos móviles a menores de 16 años. Jiménez observa diariamente la «adicción» que desarrollan los adolescentes hacia los dispositivos electrónicos y los efectos negativos en su capacidad de atención y concentración. Asimismo, señala consecuencias perjudiciales para la salud física y mental, incluyendo la falta de sueño, estrés y depresión.
Estos esfuerzos conjuntos forman parte de una creciente preocupación sobre el impacto de los dispositivos móviles en la infancia y adolescencia, destacando la importancia de proteger y preservar el bienestar y el desarrollo saludable de los más jóvenes.
