En Ledaña se está tramitando una nueva macrogranja porcina diseñada para el cebo de 2.000 cabezas en dos ciclos y medio anuales, por lo que producirá 5.000 cerdos al año. La nueva macrogranja se encuentra en fase de inicio y recepción de documentación, pero ya se pueden consultar su proyecto en el portal de expedientes de impacto ambiental de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Esta instalación generará anualmente 4.300 metros cúbicos de purines, 14,4 toneladas de nitrógeno, 18,2 toneladas de metano liberadas al aire, así como emisiones de amoniaco, sulfhídrico y anhídrido carbónico.
El proyecto, ubicado en el paraje Corral de Cañete, estima un consumo de agua de 7 millones de litros anuales, que el promotor ha solicitado a la Confederación Hidrográfica del Júcar. Según el expediente de tramitación, este volumen de agua se ha solicitado para riego por goteo, por lo que si se concede no debería utilizarse para uso ganadero.
La sociedad promotora, SOFCAR de Ganados SL., se creó hace dos años y está domiciliada en Iniesta. Sus administradores, según información pública del Registro Mercantil, proceden del sector de la construcción ya que actualmente son administradores de dos sociedades, domiciliadas en Iniesta y Villarta, dedicadas a la construcción de edificios residenciales.
Ledaña, con 1.563 habitantes, ya cuenta con una macrogranja porcina, ubicada en el paraje Los Villares, que inició su actividad con 1.661 cerdos de cebo y que en 2021 recibió autorización para ampliar a 7.200 cabezas. Además, el municipio cuenta con numerosas macrogranjas de pollos de engorde que suman más de 567.000 cabezas según la base de datos de expediente ambiental de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Si se llega a construir este nuevo proyecto en Ledaña habrá una ratio de 6 cerdos por habitante y 363 pollos por habitante.
Zona declarada como vulnerable a nitratos
La totalidad del término municipal de Ledaña está situada dentro de la zona declarada como vulnerable a la contaminación a nitratos por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha por lo que la Asociación Pueblos Vivos Cuenca teme que con la construcción de una segunda macrogranja porcina “se agrave el problema de contaminación del agua subterránea con nitratos y en el futuro afecte al abastecimiento de los habitantes, como ya ocurre en muchos pueblos que cuentan con explotaciones de ganadería industrial”.
Remedios Bobillo, presidenta de la Asociación Pueblos Vivos Cuenca, asegura que “estamos ante una amenaza para la vida rural, ya que estas macrogranjas no crean prácticamente empleo al estar muy automatizadas”. Además, alerta del riesgo de ampliación sobre el proyecto inicial: «Se ha solicitado una macrogranja de 2.000 cerdos, pero es muy probable que una vez construida se solicite su ampliación, como ha pasado en multitud de pueblos, incluido Ledaña”.
Según Pueblos Vivos Cuenca, “este nuevo proyecto sigue confirmando la inutilidad de la moratoria a las macrogranjas porcinas aprobada en Castilla-La Mancha, que lo único que ha hecho ha sido animar a los promotores e integradoras a dimensionar las cifras de sus proyectos y esperar al final de la moratoria para ampliarlas mediante modificaciones no sustanciales”.