Los seguidores de Supervivientes All Stars han vivido una gran final llena de sorpresas y tensiones que culminó con la inesperada victoria de Rubén Torres. La noche estuvo marcada por un emocionante «sorpasso» en el que la competencia se tornó casi frenética, dejando a los espectadores en un estado de incredulidad hasta el último momento.
Torres, quien había sido el segundo clasificado en la edición anterior, logró captar la atención del 51,3% del público, superando a Jessica Bueno, otra de las grandes favoritas. Desde el inicio del proceso de votación en Mediaset Infinity, Bueno había comenzado con ventaja, siendo ella la que acaparó la mayor parte de los votos. Sin embargo, el giro de los acontecimientos llegó cuando Jorge Javier Vázquez anunció, con gran dramatismo, que ambos finalistas estaban empatados al 50% en los últimos momentos de la gala.
Este apretado enfrentamiento hizo que el ambiente en el plató se tornara electrizante, con los corazones de los espectadores y concursantes latiendo al unísono. La tensión era palpable, y la incertidumbre sobre quién se alzaría con la victoria aumentaba con cada segundo. Finalmente, el destino de Jessica fue sellado en una palestra inicial contra Miri Pérez-Cabrero, en un enfrentamiento que también resultó ser muy ajustado, pero que finalmente le dio la oportunidad a Jessica de medirse en la gran final.
La noche culminó con Rubén Torres recibiendo el cheque que lo proclamaba ganador, un momento emotivo que no solo lo consagra como el campeón de esta edición, sino que también representa un cierre personal tras su segundo puesto en la anterior edición. Su trayectoria en el programa ha demostrado su capacidad para superar retos, convirtiéndose en un competidor formidable a lo largo del concurso, en el que ostenta el récord de collares de líder, un símbolo de su destreza en los desafíos.
A lo largo de la gala, el camino hacia la victoria de Torres fue una montaña rusa de emociones, no solo para él, sino para todos los que han seguido su travesía en la isla. Su triunfo es un testimonio del poder de la perseverancia y el apoyo del público, que decidió que su esfuerzo y dedicación merecían ser recompensados. Así, en una velada llena de giros inesperados, Supervivientes All Stars se despide, dejando tras de sí una historia de lucha y un desenlace que muchos no olvidarán fácilmente.

 
							 
 
				







 
 
 
 
 
 
 
