El Tren de los Molinos, una iniciativa turística promovida por el Ayuntamiento de Campo de Criptana, ha reanudado su actividad tras el parón estival, dando la bienvenida a un centenar de pasajeros que llegaron desde la estación de Chamartín en Madrid. Los visitantes disfrutaron de un día lleno de teatro, gastronomía, vino y referencias al Quijote, en una jornada que se ha consolidado como un atractivo en la región manchega.
El alcalde de Campo de Criptana, Santiago Lázaro, ha valorado positivamente el regreso de este recurso turístico, que en su jornada de apertura ha superado una ocupación del 80%. “Es un producto muy consolidado y cuidado que permite disfrutar de una experiencia perfectamente preparada”, afirmó Lázaro, quien también destacó que gran parte de los turistas son extranjeros que se encuentran de visita en Madrid.
El trayecto del tren se convierte en una experiencia teatralizada, donde un actor presenta a los viajeros la historia y las particularidades de los lugares que visitarán. La jornada incluye una visita al Pozo de Nieve, utilizado desde el siglo XVII para almacenar nieve, así como a la bodega Castilblanque, que ofrece un enfoque cultural unido a la experiencia enológica.
Uno de los momentos más destacados del recorrido es la visita a la Sierra de los Molinos, un emblema de la identidad castellanomanchega. En el Centro de Interpretación, los turistas pueden aprender sobre el funcionamiento de estos históricos molinos. Según el alcalde, “es un producto muy cuidado que tiene mucha aceptación por parte del público”, y se prevé que las próximas ediciones agoten sus entradas.
Este tren turístico opera en primavera y otoño, y en los siete viajes realizados antes del verano se superó el 70% de ocupación. Con tres trayectos restantes programados para septiembre y octubre, el interés es alto y se espera alcanzar el cartel de ‘no hay billetes’.
La experiencia ha sido calificada como exitosa, no solo por la afluencia de público, sino también por la satisfacción expresada en encuestas a los visitantes. “Nuestra aspiración no es conseguir más turistas, sino que la experiencia sea memorable y se recomiende”, explicó el alcalde, haciendo énfasis en que los resultados del Plan de Sostenibilidad Turística, iniciado en 2022, ya son visibles.
Dentro de este plan, se han realizado mejoras en la accesibilidad en la Sierra de los Molinos y se han puesto en marcha eventos como el Airén Fest y Escenario Infinito, que tendrá lugar del 4 al 6 de octubre. Además, se están preparando iniciativas de digitalización para facilitar el acceso a información turística.
Miguel Ángel Castilblanque, de Bodegas Castilblanque, ha reiterado su apoyo a esta iniciativa, destacando que cada visitante que asiste se va con una historia que contar. A través de un recorrido teatralizado, se les introduce a la tradición vitivinícola local y se les ofrecen degustaciones de productos de la zona, vinculando la experiencia del vino con la gastronomía manchega.
Castilblanque subraya que el proyecto no solo promueve su bodega, sino también a pequeños productores locales, mezclando el patrimonio cultural con los recursos turísticos. Además, destaca la importancia de la moderación en el consumo del vino, presentándolo no solo como una bebida alcohólica, sino como parte de una dieta equilibrada.
El Tren de los Molinos se erige así como un claro ejemplo de cómo se pueden transformar los recursos culturales en productos turísticos rentables, incentivando a los visitantes a disfrutar de la rica herencia de Campo de Criptana.