El municipio de El Toboso (Toledo) cuenta ahora con un monolito de señalización del Camino de Santiago, marcando específicamente el kilómetro 739, que es la distancia que separa esta localidad manchega de Santiago de Compostela. El monolito, situado en la Plaza Mayor de El Toboso junto a su Iglesia y bajo un ventanal con una venera, fue construido por un cantero de Galicia.
La inauguración contó con la presencia de la alcaldesa de El Toboso, Pilar Arinero, y varios concejales, además de José Carlos Delgado e Isabel Sánchez Duque, en representación de la Orden de Caballeros de Santiago de La Mancha. También asistieron Enrique Lillo, comendador de Castilla-La Mancha de la Orden del Camino de Santiago, el Juez de Paz de El Toboso y numerosos vecinos.
Pilar Arinero destacó la importancia de este monolito, afirmando que «visibiliza el fuerte vínculo existente entre El Toboso y el Camino de Santiago, ya que la Patria de Dulcinea también es lugar de paso y parada de numerosos peregrinos que eligen realizar el camino más largo y más duro para llegar a su meta». Además, recordó que en el Pozo de la Virgen de los Remedios confluyen dos de los caminos de esta famosa ruta de peregrinaje: el Camino de Levante y el Camino del Sureste, ambos con más de 1.100 kilómetros de recorrido.
Arinero añadió que «con este monolito, los peregrinos tendrán un referente al saber cuántos kilómetros quedan hasta llegar a Santiago de Compostela y, al mismo tiempo, podrán disfrutar de la patria de Dulcinea y de todo su encanto cervantino». Subrayó la importancia de este símbolo para fomentar el turismo cultural y religioso en la localidad.
El monolito fue bendecido por el párroco de El Toboso, Juan Miguel Romeralo, capellán de la Orden del Camino de Santiago, en una ceremonia que reflejó la conexión espiritual y cultural que une a El Toboso con el histórico Camino de Santiago.