En el encuentro correspondiente a la 20ª jornada en la División de Honor Oro Femenina de balonmano, el equipo del Grafometal La Rioja demostró su superioridad sobre el Soliss BM Pozuelo, finalizando el juego con una amplia ventaja de 18 goles, con un marcador de 38-20. Desde el inicio, las locales impusieron un ritmo de juego que las visitantes, dirigidas por Eusebio Angulo, no lograron igualar, a pesar de su esfuerzo por mantenerse en competencia durante los primeros minutos. La diferencia se hizo notoriamente insalvable especialmente después de la primera exclusión del equipo manchego, lo que cambió drásticamente el curso del juego.
A lo largo del partido, el Grafometal La Rioja mantuvo su intensidad tanto en ataque como en defensa, dificultando cualquier intento del Soliss BM Pozuelo por acortar distancias. A pesar de las estrategias y los cambios implementados por el técnico visitante para intentar revertir la situación, las locales continuaron dominando el encuentro, llegando a tener una ventaja de nueve goles al descanso. En la segunda mitad, aunque el Soliss BM Pozuelo trató de mejorar en defensa, una nueva exclusión agravó su situación, permitiendo al Grafometal La Rioja ampliar aún más la brecha en el marcador. El esfuerzo del equipo visitante por mantenerse competitivo fue evidente, pero no suficiente para cambiar el resultado final, culminando en una clara derrota en su visita a Logroño.