Esta semana, el Senado de Estados Unidos dio luz verde a la nominación de Benjamín León como nuevo embajador en España, un puesto que había sido propuesto por el presidente Donald Trump desde enero. León, un empresario de 80 años originario de Holguín, Cuba, emigró a Miami en 1961 y ha ganado notoriedad como un exitoso emprendedor y filántropo, destacándose por su trabajo en el sector sanitario con la fundación de Leon Medical Centers.
En su audiencia de confirmación, el embajador designado manifestó su intención de abordar con el Gobierno español el incumplimiento del gasto en defensa del 5% que debe cumplir la OTAN. León expresó su preocupación por que el presidente Pedro Sánchez haya reducido la meta original, sugiriendo que es un «grave error» que debe corregirse. Su papel, a juicio del nuevo embajador, será crucial para hacer valer esa posición ante las autoridades españolas.
León ha sido conocido no solo por su trayectoria empresarial, sino también por su apoyo financiero al Partido Republicano. En 2015, realizó una contribución significativa a la campaña presidencial de Marco Rubio y ha mantenido una relación cercana con figuras del partido, lo que podría influir en su actividad diplomática y en las relaciones futuras entre Estados Unidos y España.
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