El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha expresado su descontento con la actual administración del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), especialmente en cuanto a la línea de Alta Velocidad Española (AVE) que afecta a la ciudad. En un encuentro previo a la Asamblea de Ciudades AVE de España celebrada en Toledo, Velázquez ha señalado que la situación de retrasos y cancelaciones ha tenido consecuencias graves, como la pérdida de empleo por parte de los usuarios afectados.
Velázquez ha señalado que, pese a la comprensión de los derechos laborales de convocar huelgas por parte del personal de Renfe y Adif, es imprescindible garantizar la frecuencia del servicio en días no afectados por las protestas. El Ayuntamiento de Toledo ha tomado medidas para mejorar la movilidad y la vida de los trabajadores que diariamente se desplazan a Madrid, incluyendo la implementación de zonas de aparcamiento cercanas a la estación de tren.
En su discurso, Velázquez ha exigido a Adif que cumpla con sus obligaciones y mantenga el calendario de frecuencias, un sentimiento respaldado por la Junta que reclama respuestas concretas a los problemas presentados.
Por otro lado, Angie Moreno, la presidenta de la Red de Ciudades AVE de España y delegada de turismo de Sevilla, ha mostrado solidaridad al mencionar que su ciudad también se ve afectada por retrasos similares, específicamente en la ruta Sevilla-Madrid, que ahora toma cerca de tres horas.
Además, el alcalde toledano ha destacado la importancia del AVE Madrid-Lisboa para la ciudad de Toledo. Historiamente limitada por su geografía, Toledo nunca ha tenido una línea ferroviaria a través de la cual pudiera haber continuidad. Velázquez ha reiterado el total compromiso de Toledo con este proyecto y ha anticipado que cualquier decisión sobre la parada de Toledo en dicha línea sería consensuada entre el Ayuntamiento, la Comunidad Autónoma y el Ministerio de Transportes y Fomento. Velázquez ha remarcado que esta infraestructura es vital no solo para la ciudad y la región, sino también a nivel nacional y europeo, enfatizando el deseo de ser un acicate y no un obstáculo para su realización. La decisión integrará una estación de largo recorrido y otra lanzadera, como la que ya posee Toledo, y será un acuerdo unánime entre las diferentes administraciones involucradas.
