El portavoz de Empleo y Agricultura del grupo socialista en las Cortes regionales, Antonio Sánchez Requena, ha criticado la actitud de hipocresía y populismo del grupo parlamentario Vox en relación a las subvenciones que reciben los partidos políticos. En una rueda de prensa en la sede regional socialista, Sánchez Requena ha señalado que Vox tendrá una «prueba de fuego» al tener que solicitar las subvenciones para el funcionamiento de su grupo, a pesar de sus constantes críticas al sistema.
El PSOE de Castilla-La Mancha ha puesto en marcha una propuesta para que sean los propios partidos políticos los que soliciten las subvenciones a las que tienen derecho, con el objetivo de desenmascarar la hipocresía y el populismo de Vox en este tema. Sánchez Requena ha destacado que esta propuesta pondrá a prueba si Vox realmente rechaza los «privilegios» de los que tanto habla o si se trata simplemente de un discurso populista y demagógico.
Además, el portavoz socialista ha contrastado los recortes en igualdad en ayuntamientos y comunidades autónomas gobernadas por el PP y Vox, con los avances en Castilla-La Mancha liderados por el Gobierno de Emiliano García-Page. En este sentido, ha celebrado la apertura de la consulta pública para la elaboración de la ley contra la brecha salarial de género, destacando que esta medida contribuirá a reducir la desigualdad y la pobreza en la región.
Por otro lado, Sánchez Requena ha criticado las declaraciones de la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, quien culpó a la inmigración del primer caso de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo. Según el portavoz socialista, estas declaraciones demuestran que a Vox no le preocupa la realidad sanitaria, sino que están impulsados por el odio y la xenofobia. Ha recordado que durante la pandemia de COVID-19, Vox se opuso a medidas de prevención como los cierres perimetrales, y ahora culpan a los inmigrantes de problemas sanitarios, mostrando su postura xenófoba.
En definitiva, Sánchez Requena ha instado a Vox a demostrar con hechos su rechazo a los «privilegios» que critican y a dejar de lado el populismo y la demagogia en beneficio de la ciudadanía.