El secretario general del PSOE de la provincia de Toledo, Álvaro Gutiérrez, ha criticado la actitud «indignante e irresponsable» del presidente del PP en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, por negarse a respaldar la condonación de aproximadamente 5.000 millones de euros de deuda pública de la Comunidad Autónoma. Gutiérrez ha argumentado que esta negativa está perjudicando a miles de personas que podrían beneficiarse de mejoras en los servicios públicos e infraestructuras de la región.
En declaraciones realizadas durante su visita a las festividades patronales en el municipio toledano de Paredes de Escalona, Gutiérrez cuestionó cómo es posible que alguien que aspira a presidir Castilla-La Mancha se oponga a una quita tan significativa, especialmente considerando que dicha deuda se origina en la mala gestión del PP durante la presidencia de María Dolores de Cospedal. Los socialistas han resaltado estas palabras en una nota de prensa.
El líder socialista ha calificado como «absolutamente impensable» y «indignante» la postura de Núñez, enfatizando que esta condonación representa una oportunidad histórica que podría destinarse a cubrir múltiples necesidades y a mejorar los servicios esenciales en localidades pequeñas. Gutiérrez también ha señalado que el rechazo del PP a esta medida responde a un «seguidismo y falta de liderazgo» por parte de su presidente, quien, según él, no se atreve a desafiar a su partido en Madrid ni a defender los intereses de Castilla-La Mancha.
El secretario provincial del PSOE ha interpelado sobre la credibilidad de quien exige más recursos y servicios para la región, pero rechaza el mayor alivio financiero que ha tenido Castilla-La Mancha simplemente para no incomodar a la dirección nacional de su partido. Además, ha recordado que la condonación de la deuda permitiría al Ejecutivo regional ahorrar más de 750 millones de euros en intereses durante la próxima década, y ha subrayado que los criterios establecidos por el Estado para esta condonación atenderían a demandas históricas de la región, como la despoblación y la dispersión poblacional.
Gutiérrez ha lamentado que la postura de Núñez «hace daño directo a los pueblos más pequeños, a la Castilla-La Mancha rural y a todas las personas que dependen de servicios públicos de calidad». Ha insistido en que no se puede exigir mejoras por un lado y, por otro, oponerse a una medida que solo traería beneficios a la región.
Por último, Álvaro Gutiérrez ha instado al PP de Castilla-La Mancha a «reflexionar» sobre su posición y a dejar de «hacer la gracieta» al oponerse a una quita que, según apunta, se debe en gran parte a la deuda generada durante el mandato de María Dolores de Cospedal, que ha dejado una huella negativa en la historia de la región.