El presidente de la región de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, afirmó en un evento informativo de Encastillalamancha.es que no se considera apto para ser presidente del gobierno español y que existen numerosas personas en el país con las habilidades necesarias para ocupar este cargo. Aunque reconoce que llegar a esta posición sería un logro notable, García-Page declaró que no se ve con la capacidad requerida para este puesto y que, por lo tanto, actúa de manera honesta y abierta en cuanto a sus ambiciones políticas.
El presidente regional explicó que, si tuviera una ambición nacional, tendría que actuar de forma diferente y quizás no tendría la misma integridad y transparencia que tiene ahora. García-Page ilustra su argumento recordando la gestión de la expresidenta regional, María Dolores de Cospedal, que, según él, colocó sus intereses nacionales por encima de la gestión de la Comunidad Autónoma y, como resultado, no se enfrentó a Murcia ni tuvo que litigar. En general, García-Page se muestra como un político con una agenda política muy clara y enfocado en el bienestar de sus ciudadanos.
