El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha dado su recomendación a los independentistas catalanes que tienen dudas respecto a si la amnistía es constitucional. Les ha sugerido que lean las actas de los debates de la ponencia constituyente de la Carta Magna, ya que el Tribunal Constitucional hace referencia a ellas cuando tiene «alguna duda» al respecto.
García-Page ha destacado la importancia de tener en cuenta que la amnistía está fuera de la Carta Magna, ya que fue debatida y descartada en los debates constitucionales. Añade que si alguien llegara a decirle al constituyente que existe un modelo de autoamnistía, eso no tendría cabida en ninguna futura constitución posible en el universo.
Durante una conferencia inaugural en las jornadas ‘Castilla-La Mancha hacia el futuro’, organizadas por Europa Press, el líder autonómico ha criticado a los independentistas que intentan reinterpretar el pasado y el pasado de los demás para establecer su propio imaginario de derechos adquiridos. Avisó a estos grupos que si es necesario, su Comunidad Autónoma «parará trenes» y exhibirá su pasado.
El presidente hizo referencia al hecho de que solo el 4% de los miembros del Consell de la República haya votado en una consulta pública mostrando su apoyo a bloquear la investidura. De manera irónica, comentó que podría ser que el cien por cien de los miembros haya votado, pero simplemente no están inscritos oficialmente. Destacó la curiosidad de cómo la Generalitat paralela considera que el 96% que no ha votado sea un aval para hacer lo que quieran.
En otro tema, García-Page señaló que, en caso de haber gobierno y una eventual reforma constitucional, sería recomendable buscar fórmulas para evitar bloqueos electorales o investiduras que requieran de múltiples pactos. Ejemplificó con el modelo de Castilla-La Mancha, donde si no hay una mayoría parlamentaria en dos meses después de las elecciones, gobernaría la lista más votada.
Finalmente, el presidente afirmó que existen modelos que se cierran para evitar estar permanentemente en un caos que no es culpa de nadie pero es responsabilidad de todos. Con esto, García-Page busca fomentar el diálogo y la estabilidad política en beneficio de todos los ciudadanos.
