La secretaria general y portavoz parlamentaria del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Carolina Agudo, ha instado al presidente regional, Emiliano García-Page, a trabajar por el Pacto Regional por el Agua y a poner fin a las «guerras» que, según ella, buscan dividir a los castellanomanchegos.
Durante una conferencia de prensa en las Cortes regionales, Agudo reafirmó la postura del PP, que ha defendido de manera constante, caracterizada por un compromiso activo con lo establecido en el Pacto Regional por el Agua. Recordó que el presidente del PP-CLM, Paco Núñez, presentó este pacto al líder del PP nacional, Alberto Núñez Feijóo, durante una interparlamentaria en Toledo.
Agudo destacó que Núñez representa una alternativa de gobierno que se comprometería a implementar los acuerdos firmados por casi 50 entidades regionales en el Pacto del Agua, algo que, según ella, García-Page no ha logrado comunicar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Además, reclamó al presidente regional que explique su desacuerdo con la firma del pacto a los ciudadanos de Castilla-La Mancha. Reiteró que el PSOE debería cesar la «guerra» por el agua que se desarrolla en las redes sociales, una crítica que se centra en el número dos de Page, Sergio Gutiérrez, acusándolo de no abordar las preocupaciones reales de los castellanomanchegos.
Agudo expresó su sorpresa ante el «nerviosismo» que, a su juicio, se ha apoderado del Gobierno y de los portavoces socialistas. Consideró que el PSOE de Castilla-La Mancha, que solía ser considerado un partido serio, ha degenerado en lo que describió como una caricatura, citando específicamente la dinámica entre Page y Gutiérrez.
La portavoz del PP acusó al PSOE de intentar dividir a la sociedad en torno al asunto del agua, en un momento en que existe un acuerdo común a través del Pacto Regional por el Agua, que, según su opinión, el Gobierno de García-Page no está cumpliendo. Denunció que, a lo largo de 40 años, el tema del agua ha sido utilizado como una herramienta política para polarizar a la sociedad en lugar de trabajar en pro de lo establecido en el pacto.
Al final, Agudo cuestionó la posición de García-Page respecto al Pacto del Agua y llamó a su administración a centrarse en los problemas reales que afectan a Castilla-La Mancha, especialmente en el ámbito sanitario, en lugar de continuar divisiones que solo sirven para obtener réditos electorales.