La portavoz del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Alejandra Hernández, ha exigido este sábado al presidente regional, Emiliano García-Page, y a su gobierno que conviertan los 686 millones de euros adicionales que se contemplan en el próximo presupuesto regional «en hechos y no en titulares de prensa». Hernández ha señalado que al PSOE «se le han acabado ya las excusas» y ha criticado el «inmovilismo» que, según ella, perjudica gravemente a la comunidad autónoma.
En una atención a medios, Hernández ha recordado que los socialistas de la región siguen utilizando diversas justificaciones para no enfrentar los problemas que afectan a Castilla-La Mancha. Entre estos, ha destacado la situación de la sanidad, donde ha urgido a recuperar la carrera profesional sanitaria, eliminar listas de espera y modernizar la Atención Primaria.
La portavoz del PP también se ha hecho eco de la precaria situación en la educación pública, lamentando que en lugares como Santa Cruz del Retamar se puedan observar colegios con zonas apuntaladas y donde los niños deben salir al recreo en una vía pública con tráfico de vehículos. Hernández ha asegurado que esta es una realidad muy alejada de lo que el PSOE, con García-Page al frente, presume.
Asimismo, ha denunciado la reducción de recursos en centros de atención a niños con discapacidad, un recorte que implica la eliminación de personal como enfermeras y otros profesionales de apoyo.
Respecto a la elevada inflación en la región, que ha sido calificada como «la mayor de todo el país», Hernández ha señalado que García-Page no está tomando medidas efectivas para ayudar a los ciudadanos, ni bajando impuestos ni aliviando la carga económica de las familias y empresas.
A través de sus declaraciones, Hernández ha afirmado que Castilla-La Mancha está «perdiendo oportunidades» debido a la gestión del socialismo y ha instado a García-Page a destinar los 686 millones de euros extra en el presupuesto a resolver las necesidades de los ciudadanos de la región. La portavoz ha pedido «responsabilidad y seriedad» en la gestión, instando al gobierno a centrarse en trabajar por el bienestar de los castellanomanchegos en lugar de perderse en mensajes mediáticos y justificaciones.