El Gobierno de Castilla-La Mancha ha puesto en marcha el Plan Adelante, un programa que tiene como uno de sus ejes fundamentales la innovación y la transformación digital. Con una inversión superior a los 50 millones de euros, este plan busca acompañar a las pequeñas y medianas empresas (pymes) y autónomos de la región en sus proyectos de transición digital e innovación.
La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, destacó recientemente la importancia de este acompañamiento, subrayando que la revolución digital es un proceso irreversible en todos los ámbitos de la economía y la sociedad. Durante su intervención en la jornada ‘La inteligencia artificial y las nuevas tecnologías’, organizada por El Español en Toledo, señaló que la administración autonómica aborda este cambio de manera transversal, garantizando que ninguna persona o colectivo quede excluido del acceso a la digitalización.
Patricia Franco manifestó que hoy en día, muchas empresas emergentes ya entienden la necesidad de la transformación digital como un pilar fundamental de su funcionamiento. Gracias al Plan Adelante, más de 560 empresas han recibido apoyo en sus proyectos de investigación y desarrollo (I+D) y digitalización en las ediciones anteriores. La consejera delineó cuatro líneas de actuación clave para el Ejecutivo: la transformación interna de la administración, el desarrollo de infraestructuras comunicativas, programas de apoyo a los procesos de digitalización y, fundamentalmente, la formación y cualificación de los profesionales.
La formación ha sido resaltada como un aspecto vital en este proceso de transformación, con Franco recordando que la historia de las revoluciones industriales muestra que, si bien el empleo se transforma, no se destruye. A su vez, manifestó que la digitalización puede hacer que los empleos sean más atractivos, pero solo si se acompaña de la formación adecuada.
En el ámbito de captación de proyectos de inversión en nuevas tecnologías, la consejera mencionó la potencial llegada de iniciativas como la de Meta, destacando que Castilla-La Mancha se encuentra en una posición estratégica para atraer entre cuatro y cinco proyectos relacionados con centros de datos. Según Franco, la región cuenta con un liderazgo en energías renovables, pionera en estrategias de economía circular y una firme apuesta por la sostenibilidad, lo que la convierte en un polo estratégico para los desarrollos tecnológicos futuros.
