Valentín Rosier empieza a hacerse un nombre entre la afición rojilla
En el Estadio El Sadar, Valentín Rosier continúa ganándose un lugar en el corazón de los aficionados del Osasuna. El lateral derecho, quien llegó libre del Leganés, ha demostrado ser una adquisición valiosa para el equipo, especialmente tras la salida de Areso. Con su reciente actuación en la victoria contra el Rayo Vallecano, donde superó una lesión, Rosier ha dejado claro que su fichaje ha sido una de las decisiones más acertadas de la temporada.
El jugador de 29 años, con una carrera variada en ligas de Francia, Turquía y España, evidencia su potencial no solo en defensa, sino también en ataque, corriendo intensamente a lo largo del partido. A pesar de haber estado dos semanas fuera por un esguince, su regreso fue destacado, jugando los 90 minutos sin molestias y registrando un recorrido impresionante de 10 kilómetros en el campo. Con un contrato que se extiende hasta 2027 y una cláusula de rescisión de 15 millones de euros, su futuro parece brillante en Pamplona.
Potencia física y recuperación récord
La versatilidad de Rosier es uno de sus grandes aliados. Tanto en una línea defensiva de tres como de cuatro, se adapta para convertirse en un fundamental en el esquema del técnico Alessio Lisci. Su capacidad para presionar y regresar rápidamente a su posición en defensa promete fortalecer la zaga rojilla. Este despliegue físico, que ya había mostrado en su temporada pasada en Leganés, ha sido clave para su integración en este nuevo proyecto que busca consolidar el estilo del equipo en LaLiga.
