El próximo lunes se establecerán en las localidades de Letur y Mira comisiones de coordinación con el objetivo de abordar los daños ocasionados por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que ha afectado a estas áreas. Estas comisiones contarán con la representación de las cuatro administraciones implicadas: Gobierno central, autonómico, y las administraciones provincial y municipal.
El anuncio fue realizado este sábado por el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien expresó que estas comisiones estarán operativas «los meses que sean necesarios» hasta que se logre una solución definitiva a la situación. García-Page también hizo referencia a la declaración del Consejo de Ministros del próximo martes sobre la zona gravemente afectada, la cual fue mencionada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su declaración institucional.
El presidente regional subrayó que ya se está llevando a cabo un trabajo de evaluación de las necesidades de las familias afectadas, destacando que se ha anticipado la identificación de problemas específicos en Letur y Mira. «Es fundamental canalizar tanto la ayuda solidaria como la privada y atender a cada familia en su singularidad, porque no hay fórmulas mágicas», añadió García-Page, enfatizando la importancia de un enfoque personalizado para cada situación.
En respuesta a las desinformaciones que han circulado, García-Page defendió que, basándose en su experiencia, la mayoría de las ayudas que se activan mediante el mecanismo de emergencia resultan ser efectivas y logran resarcir una parte significativa de los daños, tanto públicos como privados.
En relación a la búsqueda de cinco personas que continúan desaparecidas en Letur, el presidente indicó que no se descartan áreas en la investigación, dado que aún no se tiene un análisis claro sobre el comportamiento del agua durante el evento. «Ojalá pudieran aparecer debajo de los escombros de las viviendas. Ya se han demolido tres y podrían llegar a diez», advirtió, resaltando que la magnitud de la fuerza del agua ha sido tan intensa que se ha registrado trabajo en zonas tan alejadas como el río Segura.