El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha tomado la iniciativa de promover la declaración del damasquinado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, además de comprometerse a abrir el Museo del Damasquinado en la ciudad.
Estas declaraciones fueron realizadas durante un acto de homenaje a Julián Simón, reconocido artesano que ha dedicado 76 años de su vida a transmitir su pasión por esta labor. Según el alcalde, referirse a Simón es referirse a Toledo, ya que representa un ejemplo de trabajo y esfuerzo que supone una responsabilidad para las instituciones públicas en relación a preservar su legado.
Carlos Velázquez ha expresado su admiración por Simón, quien goza de gran aprecio en la ciudad. Durante el acto, el alcalde trasladó sus agradecimientos a la hija de Simón, Valle Simón, por todo lo que su familia ha hecho y continúa haciendo por conservar esta tradición tan intrínseca a Toledo.
El alcalde resaltó la importancia del damasquinado como arte y como parte esencial de la identidad toledana. Desde el Ayuntamiento, creen que figuras como la de Julián Simón son fundamentales para conocer la historia de la ciudad.