Más de 1.1 millones de empleos en el sector manufacturero, y cerca de seis millones en total, podrían perderse si el Congreso no extiende las reducciones impositivas implementadas durante la administración Trump, de acuerdo con un nuevo informe. Este escenario presenta efectos negativos drásticos para las pequeñas empresas, que se perciben como rápidos, severos y completamente evitables.
Los datos del informe subrayan la situación crítica que enfrentarían los pequeños negocios si no se toma acción legislativa. En Estados Unidos, más del 96% de las empresas funcionan como «passthroughs», lo que significa que tributan a tasas individuales en lugar de corporativas. La reforma fiscal incluyó una deducción del 20% para permitir que estos negocios pequeños pudieran competir en igualdad de condiciones. Sin embargo, esta deducción está programada para expirar al final de 2025, un cambio que un reciente estudio de la Asociación Nacional de Fabricantes (NAM) indica que el 93% de los fabricantes que utilizan este esquema creen que su eliminación comprometerá su capacidad de crecimiento, creación de empleos e inversión.
El informe destaca que la reducción en la tasa máxima de impuestos y la deducción mencionada han permitido a muchas pequeñas empresas ahorrar significativamente, lo que a su vez ha facilitado inversiones en nueva maquinaria, equipos y expansión de instalaciones. Es importante resaltar que más del 74% de los fabricantes cuentan con menos de 20 empleados, lo que resalta la crítica necesidad de que el Congreso mantenga las tasas impositivas competitivas para estas entidades.
Además, el documento advierte que si no se legisla, la depreciación acelerada desaparecerá del código fiscal estadounidense, un hecho que limitará la capacidad de los fabricantes para invertir en el equipo y maquinaria necesarios para impulsar el crecimiento económico. Sin este incentivo, las empresas enfrentan costo adicional para sus inversiones en el país.
Los negocios familiares constituyen más del 90% de las empresas en América, y en el sector manufacturero, son una parte fundamental de la cadena de suministro y componentes vitales para sus comunidades locales. Sin embargo, el umbral de exención del impuesto sobre el patrimonio está programado para reducirse a la mitad al final de 2025, lo que sometería a más activos de negocios familiares a tributación, amenazando su viabilidad tras el fallecimiento del propietario. Ante esta situación, se exige al Congreso que proteja a los fabricantes familiares mediante la preservación de este umbral de exención incrementado.
El informe subraya la gravedad de la situación y la urgencia de una acción legislativa para prevenir una crisis laboral en el sector manufacturero.
Fuente: WhiteHouse.gov