El Hospital Universitario de Cuenca ha adquirido la última tecnología en radioterapia para el tratamiento de pacientes oncológicos, gracias a la reciente instalación de un nuevo acelerador lineal. Esta maquinaria de última generación, según ha indicado el vicepresidente primero del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, permitirá ofrecer tratamientos contra el cáncer en la región, eliminando la necesidad de que los pacientes viajen a otros hospitales.
Martínez Guijarro, acompañado del director gerente de la Gerencia de Atención Integrada de Cuenca, José Antonio Ballesteros, y de la delegada de la Junta en Cuenca, María Ángeles López, visitó el acelerador lineal, que se encuentra en uno de los dos búnkeres gemelos del nuevo hospital. La instalación ha requerido una inversión de cinco millones de euros y coincide con el proceso de mudanza al nuevo hospital, que ha comenzado recientemente con la llegada de los profesionales que se están familiarizando con el complejo de 75.000 metros cuadrados.
Aunque el acelerador está ya instalado, su uso efectivo depende de la obtención del permiso del Consejo de Seguridad Nuclear, un trámite que podría tardar hasta seis meses. Durante este período, se prevé que se complete el traslado total de las operaciones al nuevo Hospital de Cuenca.
El vicepresidente primero también subrayó que la apertura del servicio de Oncología Radioterápica en Cuenca responde al compromiso del Gobierno regional de garantizar que todas las provincias dispongan de estos servicios en el sistema sanitario público. La nueva Unidad de Oncología Radioterápica ocupa más de 1.600 metros cuadrados y cuenta con una sala para un TC de planificación, así como con las consultas y las salas necesarias para tratamientos.
Se estima que esta unidad podrá atender el 95 por ciento de todas las técnicas de radioterapia prescritas, lo que se traduce en aproximadamente 6.000 sesiones al año que, de otro modo, hubieran requeridos el traslado de los pacientes a otros hospitales de la región.