El Hospital Universitario de Guadalajara cuenta con una nueva Unidad de Ictus, la cual tiene como objetivo brindar una atención integral al paciente desde los primeros momentos después de sufrir un accidente cerebrovascular. Esta nueva unidad surge como parte del compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha de ampliar los servicios y prestaciones de este centro hospitalario.
Ubicada en la planta 4B del antiguo hospital, se estima que la Unidad de Ictus podrá atender cada año a entre 450 y 500 pacientes que sufren un ictus en Guadalajara, ya sea una hemorragia o un infarto cerebral. Estas patologías son muy frecuentes y constituyen la segunda causa de muerte en mujeres mayores de 65 años y la tercera en hombres, además de ser la principal causa de discapacidad.
La importancia de esta unidad radica en que no solo se brinda una atención inmediata al paciente, sino que también se garantiza su seguimiento y continuidad asistencial. De esta manera, el neurólogo encargado del caso acompaña al paciente durante su estancia hospitalaria y su proceso de recuperación, lo que permite una mejor atención y pronóstico.
Estas unidades están diseñadas para realizar una vigilancia continua durante las primeras horas, con el objetivo de evitar nuevos ictus o un empeoramiento clínico. Esto resulta fundamental para minimizar secuelas, reducir la mortalidad y mejorar la recuperación de las habilidades necesarias para las actividades básicas de la vida diaria.
La creación de esta unidad es parte del compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha de incorporar nuevas unidades en el antiguo hospital a medida que se llevan a cabo los traslados de servicios a la ampliación. De esta manera, Guadalajara se convierte en un área sanitaria pionera en la atención integral del paciente con ictus dentro del servicio público de salud.
En cuanto a las instalaciones de la unidad, se han realizado obras para unificar antiguas habitaciones y crear una sala con cuatro puestos de vigilancia permanente. Esta sala está equipada con tecnología moderna y se encuentra frente al control de enfermería, donde el personal monitorea constantemente la evolución de los pacientes las 24 horas del día.
El personal de enfermería de esta unidad se ha capacitado específicamente en protocolos de atención a pacientes con ictus y en la vigilancia y cuidados necesarios, como control de la presión arterial, saturación, sangrado, nivel de conciencia y disfagia, entre otros.
Además, en el pasillo de la unidad se han instalado barandillas que permiten a los pacientes caminar y facilitan el inicio de su rehabilitación motora.
En resumen, la creación de la Unidad de Ictus en el Hospital Universitario de Guadalajara representa un avance significativo en la atención a los pacientes que sufren un accidente cerebrovascular. Esta unidad brinda una atención integral desde los primeros momentos hasta la recuperación y rehabilitación, mejorando así el pronóstico y la calidad de vida de los pacientes.
