Toledo, 5 de septiembre de 2024.- En un pleno que tuvo lugar este jueves, se aprobó el techo de gasto de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, que asciende a 8.315 millones de euros, lo que representa un aumento del 4,5 por ciento en comparación con el año anterior. El consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina, aseguró que esta medida no generará un incremento en la presión fiscal sobre los ciudadanos y contribuye a “consolidar el progreso y el crecimiento económico” en la región.
Durante su intervención, Ruiz Molina destacó que la decisión de establecer este límite de gasto es parte del compromiso asumido en 2015 de congelar e incluso reducir la presión fiscal, tal como se hizo en los años 2022 y 2023. Este esfuerzo se alinea con otros compromisos dirigidos a reforzar el Estado del Bienestar, proteger a las familias más vulnerables, impulsar la actividad económica y luchar contra la despoblación en Castilla-La Mancha.
El consejero explicó que el techo de gasto representa el máximo que la Administración podrá gastar durante el próximo año y que se ha elaborado con “máxima prudencia”, basándose en los recursos previstos del sistema de financiación autonómica, así como en las estimaciones de recaudación tributaria y transferencias no finalistas. “Con esto, tenemos los mimbres necesarios para elaborar un presupuesto que mejore la calidad de vida de la ciudadanía y favorezca el desarrollo económico de la región”, afirmó Ruiz Molina.
En cuanto al aspecto económico, Ruiz Molina subrayó que Castilla-La Mancha se encuentra en un periodo de crecimiento sostenido, con previsiones de crecimiento del 2,3 por ciento para finales de 2024 y del 2 por ciento del PIB en 2025. Esta situación se ve respaldada por entidades reconocidas como la AIReF y otros servicios de estudios. Además, se destacó la contención de la inflación, que actualmente se sitúa en un 2,6 por ciento, con expectativas de reducción.
En un contexto político estable en la comunidad autónoma, Ruiz Molina defendió la importancia de mantener esta estabilidad en contraste con la situación nacional, donde el techo de gasto propuesto por el Gobierno central fue rechazado en el Congreso. Hizo un llamado a los grupos políticos regionales, como el PP y VOX, para que respalden en futuras votaciones aquellos acuerdos que beneficien a Castilla-La Mancha.
Durante su exposición, el consejero también desglosó los principales componentes del límite de gasto no financiero. Resaltó que los ingresos propios no financieros ascienden a 8.247 millones de euros, siendo el 88 por ciento de estos ingresos provenientes del sistema de financiación vigente. Además, el déficit autorizado para el próximo ejercicio será del 0,1 por ciento del PIB regional, equivalentes a unos 55 millones de euros.
Ruiz Molina enfatizó la necesidad de una modificación urgente del sistema de financiación autonómica, para corregir las deficiencias actuales y abordar este asunto de manera multilateral. En términos de ajustes de contabilidad nacional, se prevén 12,3 millones de euros, y se destacó que los ingresos del fondo REACT UE no fueron considerados, dado que Castilla-La Mancha ha ejecutado ya esos fondos en su totalidad.
Con estas medidas, el Gobierno regional busca no solo cumplir con las expectativas económicas, sino también asegurar un futuro prometedor para Castilla-La Mancha, consolidando su liderazgo en el crecimiento y en la atención a los ciudadanos.
