Pastrana (Guadalajara) ha dado un paso significativo hacia la preservación de su patrimonio histórico y cultural con la reciente firma de un convenio de colaboración entre la Consejería de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de la localidad. Este acuerdo busca acelerar los trámites para la rehabilitación y restauración del convento de San Francisco, un edificio de gran valor arquitectónico, con el objetivo de transformarlo en el Centro de Interpretación de la Miel y el Museo Apícola.
La viceconsejera de Cultura y Deportes, Carmen Teresa Olmedo, resaltó el compromiso del Gobierno regional, liderado por Emiliano García-Page, en la conservación de patrimonio y la colaboración estrecha con los distintos ayuntamientos de la región. «La protección de nuestro legado histórico es una prioridad, y este convenio es una prueba del esfuerzo conjunto para garantizar que estos espacios puedan ser disfrutados por las futuras generaciones,» indicó Olmedo en la firma del convenido.
Es importante mencionar que el proyecto cuenta con el respaldo del Ministerio de Industria y Turismo, que ha otorgado una ayuda de 1.492.800 euros al Ayuntamiento de Pastrana. Esta financiación está destinada a la ejecución del proyecto de rehabilitación del convento de San Francisco y la creación del nuevo centro de interpretación y museo, una iniciativa que fue presentada por la anterior corporación municipal a principios de 2023.
Sin embargo, el consistorio local se encontró con dificultades para ejecutar el proyecto en los plazos establecidos, lo que llevó a solicitar la colaboración de la empresa pública Tragsa para hacer más eficiente el proceso. Afortunadamente, esta petición fue atendida por el Gobierno regional, lo que facilita la intervención necesaria para el desarrollo del proyecto.
El convento de San Francisco, junto a su iglesia, es un conjunto monástico que data del siglo XV y que ha sufrido importantes modificaciones a lo largo de los siglos. Destacan las intervenciones en su estructura, como la cabecera tardogótica del siglo XVI, atribuida al arquitecto Alonso de Covarrubias, y las ampliaciones llevadas a cabo por fray Pedro González de Mendoza en 1630.
La creación del Centro de Interpretación de la Miel y el Museo Apícola no solo contribuirá a la valorización de este monumento, sino que también permitirá poner de relieve la riqueza de la apicultura en la región, promoviendo así la cultura y el turismo en Pastrana. Este proyecto representa una oportunidad para que los visitantes y residentes aprecien tanto la historia del convento como la importancia de la miel en la agricultura y economía local.
