El consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, asistió el jueves pasado a la inauguración del III Congreso Nacional de Gestión de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE), que se celebra el 17 y 18 de octubre en el Palacio de Congresos de Toledo, donde comunicó el compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha en la necesidad de avanzar en la gestión sostenible a todos los niveles y, en lo que atañe a los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos.
Escudero destacó el compromiso de Castilla-La Mancha con la sostenibilidad y la necesidad de transitar hacia un modelo económico respetuoso con el medio ambiente, recalcando que “para lograrlo es fundamental sumar esfuerzos y fortalecer la alianza entre administraciones públicas y sociedad civil”.
El consejero estuvo acompañado por el viceconsejero de Medio Ambiente, Fernando Marchán; la directora general de Economía Circular, Marta Gómez; el director general de la Fundación Ecolec, Luis Moreno; y el director general de Biodiversidad y Calidad Ambiental del Ministerio de Transición Ecológica, Javier Cachón De Mesa.
Escudero transmitió el apoyo del Ejecutivo regional al desarrollo sostenible y ha valorado la necesidad de impulsar una serie de iniciativas incardinadas en la estrategia de la Agenda 2030 y en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.
Como afirmó José Luis Escudero, se viene avanzando de forma extraordinaria en la gestión y el desarrollo tecnológico del reciclaje de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, «pero queda una tarea pendiente, no solo de mejora de la normativa –que siempre es susceptible de ser mejorable- sino especialmente en lo que afecta a la divulgación para trasladar al conjunto de la sociedad la importancia estratégica de gestionar estos residuos».
En este sentido, el consejero remarcó que para lograr la meta, la acción “pasa por enmarcar esta tarea en un contexto en el que nos jugamos la sostenibilidad de nuestro ecosistema, que es tanto como decir, el futuro de nosotros y de las generaciones venideras».
A su vez, indicó que en una economía que avanza cada vez más hacia la digitalización, el efecto de los RAEE ha ido en aumento como consecuencia de sus ciclos de innovación y sustitución y “el hecho de que sus componentes sean peligrosos, hace necesario que se mejore el control sobre su reciclaje para reducir su contaminación sobre la atmósfera”. En el año 2018, Castilla-La Mancha ha recogido cerca de 13.500 toneladas de RAEE, «una cifra importante pero en la que debemos seguir avanzando», ha dicho el consejero.
Desafíos principales del Congreso
Durante el Congreso, productores, fabricantes y consumidores del sector han abordado a través de diferentes mesas redondas y ponencias la manera de progresar en gestión final del residuo derivado de los aparatos electrónicos y con el objetivo de reducir el impacto sobre el medioambiente, con desafíos esenciales como adecuación y puesta en marcha de la recogida separada de RAEE en instalaciones municipales o tecnología que puede ser utilizada en una orientación a un modelo productivo sin residuos.
Sobre este tema, José Luis Escudero subrayó la importancia de avanzar en materia de Economía Circular, en la gestión y el desarrollo tecnológico del reciclaje de los RAEE; en el papel que los sistemas colectivos juegan y, por supuesto, en el que desempeñan la comunicación y divulgación de su correcto reciclaje, así como la trasposición de decisiones de la UE en materia de reciclaje y transporte de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos.
El foro, organizado por el Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) contó con la participación del Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO), el Ayuntamiento de Toledo, la Asociación de Periodistas de Información Ambiental (Apia); colectivos como WEEE Forum, las diferentes empresas fabricantes y las distintas entidades que conforman el citado colectivo.