El Gobierno de Castilla-La Mancha reafirma su compromiso con el Estado de Bienestar, cumpliendo con los objetivos marcados en el Plan de Choque para la economía de los cuidados y refuerzo de las políticas de inclusión.
La consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, ha asistido a la primera reunión presencial después del proceso electoral del mes de julio, del Consejo Territorial de Servicios Sociales y del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia, que se ha celebrado hoy en el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Durante la reunión se ha informado, entre otros asuntos, sobre la mejora de la financiación para Castilla-La Mancha en 4,6 millones de euros para el ‘Plan de choque para la economía de los cuidados y refuerzo de las políticas de inclusión’, para proyectos de inversión dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Con el reparto informado en el día de hoy, Castilla-La Mancha va a recibir para la anualidad 2023 un total de 52.455.317 euros, lo que supone contar con 4,6 millones de euros de fondos adicionales sobre la cantidad prevista para la anualidad 2023 en el Convenio firmado con el Ministerio que era de 47.782.000 euros.
Con estas cantidades se van a financiar proyectos de inversión destinados a los nuevos servicios de teleasistencia, la transformación tecnológica y el refuerzo a la atención a la infancia, la protección residencial y las familias de acogida y la innovación en los servicios sociales, entre otros.
Además de la mejora en la financiación, también se informó sobre la distribución del tramo autonómico de las subvenciones de interés general con cargo a la asignación del 0,7 por ciento del IRPF y del IS para 2023, correspondiendo a Castilla-La Mancha 15,3 millones de euros.
Esta cuantía supone 1,4 millones de euros más que en la convocatoria anterior y un 57 por ciento más con respecto a 2017, cuando se comenzaron a gestionar estos proyectos y esta convocatoria desde las comunidades autónomas.
En resumen, el Gobierno de Castilla-La Mancha sigue apostando por el Estado de Bienestar y la inclusión social, destinando recursos económicos adicionales para impulsar proyectos que fomenten el cuidado de las personas y el desarrollo de políticas sociales. Estas inversiones permitirán mejorar los servicios de teleasistencia, fortalecer la protección a la infancia y promover la innovación en los servicios sociales, entre otras acciones. Todo esto se suma a la asignación tributaria del IRPF y del IS, que ha experimentado un aumento significativo en comparación con años anteriores, lo que demuestra el compromiso de la comunidad autónoma con el bienestar de sus ciudadanos.