Castilla-La Mancha ha conseguido poner a disposición de los hospitales de la Comunidad Autónoma el equipamiento necesario para que todos los centros que están acreditados para la realización de extracción de órganos puedan llevar a cabo donación en asistolia controlada gracias a la incorporación de tres equipos de oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO).
Así lo ha avanzado hoy la directora gerente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), Regina Leal, durante la inauguración de la decimosexta edición del curso ‘El proceso de la donación de órganos y tejidos’, en el que ha estado acompañada por la directora de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Beatriz Domínguez, y la responsable de la Coordinación Regional de Trasplantes, María José Sánchez Carretero.
La donación en asistolia es la donación de órganos y tejidos que proceden de una persona a la que se le diagnostica la muerte tras la confirmación del cese irreversible de las funciones cardiorespiratorias (ausencia de latido cardiaco y de respiración espontánea durante más de cinco minutos).
En este tipo de donante, actualmente el ECMO es la técnica de preservación más ventajosa en el momento de la extracción de órganos abdominales, en términos de mejor función inmediata del órgano trasplantado, menor número de complicaciones postrasplante, menor estancia hospitalaria y mejor supervivencia del injerto.
Con un presupuesto de 1,8 millones de euros, el SESCAM ha adjudicado la adquisición de fungible y equipamiento en cesión necesarios para la realización de terapia mediante oxigenador de membrana extracorpórea para las gerencias de Toledo, Albacete, Alcázar Ciudad Real, Guadalajara, Cuenca y Talavera, todas ellas acreditadas para la extracción de órganos.
La directora gerente del SESCAM ha recordado que Castilla-La Mancha aprobó en 2019 el Protocolo Autonómico de Donación en Asistolia Controlada para tratar de incorporar a todos los hospitales con capacidad de extraer órganos, un reto que responde a la necesidad de llegar a los máximos donantes posibles.
La incorporación de estos tres equipos de ECMO va a permitir que la implantación de la donación en asistolia controlada pueda asentarse en estos siete hospitales, con la consiguiente repercusión en el incremento del número de donaciones.
A este respecto, Leal ha indicado que los datos que arrojan los cinco primeros meses del año “nos hacen ser optimistas dado que, tras los peores momentos de la pandemia, se van recuperando las donaciones de órganos en Castilla-La Mancha”.
De enero a mayo se han registrado 28 donaciones de órganos y tejidos, un 27,3 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior. Del total de donaciones, cinco han sido en asistolia (dos en Albacete, otras tantas en Toledo y una en Guadalajara), lo que supone el 17,9 por ciento.
620 participantes en dieciséis ediciones del curso
La gerente del SESCAM ha agradecido a la directora de la ONT que apoye de nuevo con su presencia la celebración de curso al que asisten 35 profesionales de Medicina y Enfermería, seleccionados entre un total de 80 solicitudes de los distintos hospitales de Castilla-La Mancha. En las dieciséis ediciones que se han celebrado se han formado cerca de 620 profesionales.
“No hay duda de que los protagonistas del proceso de donación son los donantes y sus familias, pero la intervención de los profesionales sanitarios en todo este proceso es fundamental”, ha indicado Leal, quien ha asegurado que el Gobierno regional seguirá apoyando todas las iniciativas que se planteen para continuar fomentando la donación de órganos en la Comunidad Autónoma.
A este respecto, ha señalado que se seguirá impulsando la información, la formación y la concienciación de la ciudadanía “sobre una decisión, la de donar órganos, que puede brindar una nueva oportunidad de vivir o de mejorar la vida a otras personas que necesitan un nuevo órgano”.
Por su parte, la directora de la ONT, Beatriz Domínguez, ha trasladado su agradecimiento al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha por su apoyo tanto a la formación continua de sus profesionales en esta materia como al desarrollo del programa de donación en asistolia controlada.
“Siempre que hablamos de donación pensamos, sin duda alguna, en la solidaridad de la ciudadanía, pero para que esa solidaridad se transforme en el trasplante se necesitan dos elementos adicionales: profesionales bien formados y el apoyo institucional de las administraciones dotándoles de las herramientas necesarias”, ha concluido Domínguez.