Toledo, 24 de junio de 2017.- Desde el pasado 15 de junio se ha marcado el fin de las tarifas de itinerancia o ‘roaming’, es decir, los sobrecostes que hasta entonces las operadoras venían cobrando por hacer uso del teléfono móvil en un país de la Unión Europea diferente al de residencia.
Esta medida es consecuencia de un acuerdo al que llegaron representantes del Parlamento Europeo, del Consejo Europeo y la Comisión Europea y supone el establecimiento de límites a aplicar a partir del pasado 15 de junio. En primer lugar, entre estos límites, se establece un coste de 3,2 céntimos por minuto de llamada de voz y, en segundo lugar, se marca un coste de 1 céntimo por SMS.
También se aplica una reducción gradual a lo largo de cinco años de los límites máximos para los datos; de 7,7 euros por gigabyte (GB) que hay actualmente a 6 euros a partir del 1 de enero de 2018, y así sucesivamente hasta llegar a los 2,5 euros por gigabyte a partir del 1 de enero de 2022.
Con la entrada en vigor de este acuerdo se hace realidad la “itinerancia como en casa” prevista en el reglamento sobre el mercado único de las telecomunicaciones, lo que significa que al viajar dentro de la Unión Europea, las personas consumidoras podrán llamar, enviar SMS o navegar por Internet desde su teléfono móvil al mismo precio y en las mismas condiciones que en su país de origen.
Este acuerdo, a juicio de la Comisión Europea, hace la “itinerancia como en casa” sostenible para los ciudadanos y las empresas, al tiempo que garantiza la recuperación de los costes y mantiene la competitividad de los mercados mayoristas de itinerancia nacionales.
Desde hace una década la Comisión Europea ha venido trabajando para reducir y, en última instancia eliminar, los recargos que los operadores de telecomunicaciones imponían a sus clientes cada vez que cruzaban una frontera y utilizaban su teléfono móvil en otro país, bien durante las vacaciones o en viajes de trabajo.
Desde el año 2007 los precios de la itinerancia han disminuido más de un 90 por ciento, habiéndose producido la última bajada en abril del pasado año, fijándose en 5 céntimos por minuto de llamada de voz, 2 céntimos por SMS y 5 céntimos por megabyte (MB) de datos por encima de los tipos nacionales.
Sin necesidad de trámites
Los usuarios no tienen que realizar trámite alguno para acogerse al nuevo sistema, por lo que podrán hacer y recibir llamadas y navegar por Internet en todos los Estados miembros de la Unión Europea, además de Noruega, Islandia y Liechtenstein, al mismo precio que si estuvieran en su país. Por tanto, dejarán de aplicarse las tarifas especiales siempre que no se superen los límites citados y el tiempo en itinerancia no sea superior al de casa.
En el caso de los abonos ilimitados, la operadora deberá permitir enviar mensajes y hacer llamadas sin límite, pero podrá imponer un tope al uso de datos en ‘roaming’.
En el caso de las tarjetas prepago, el saldo da derecho a hacer y recibir llamadas y enviar mensajes sin recargo dentro de la Unión Europea, debiendo calcular la operadora la cantidad de datos incluida en la tarjeta con arreglo a su proporcionalidad con las nuevas tarifas máximas previstas.
Conviene tener presente que todas las llamadas en itinerancia se van a facturar como si fueran locales, incluidos los números internacionales dentro de la Unión Europea; no experimentará cambio alguno la tarifa a aplicar a las llamadas internacionales desde el país de residencia.