Castilla-La Mancha, a través de la Consejería de Bienestar Social, ha firmado un protocolo de colaboración con la Fundación ‘Raíces’, de Carlos Maldonado, para incluir a jóvenes, de entre 16 y 24 años, que estén tutelados por la Administración regional o lo hayan estado, en los itinerarios formativos y laborales de su restaurante escuela, dentro del ‘Proyecto Semillas’.
Dicho protocolo ha sido firmado por la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, y el prestigioso chef de Talavera de la Reina en un acto en el que también han participado la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, y la alcaldesa de la Ciudad de la Cerámica, Tita García, que también ha suscrito un convenio con la entidad para la cesión de las instalaciones municipales donde se ubica la Escuela de Hostelería.
La consejera ha comenzado agradeciendo la colaboración y la predisposición del Ayuntamiento de Talavera y su alcaldesa para poner en marcha este proyecto que va a dar “una segunda oportunidad” a chicos y chicas en situación de exclusión o vulnerabilidad “para que puedan emprender su proyecto de vida con una formación, con un acompañamiento y enseñándoles un oficio y, por tanto, insertándoles en el mundo laboral” .
El protocolo firmado entre la Administración regional y la Fundación ‘Raíces’ da cabida a las chicas y chicos que han estado o están bajo la protección de Gobierno regional mediante guarda o tutela, o una medida judicial, para optar a realizar formación y prácticas en materia de restauración, avaladas por el prestigio del cocinero talaverano para quien García Torijano ha tenido palabras de reconocimiento por “la ilusión que ha puesto en conseguir este objetivo”.
Apoyo del Gobierno regional a la transición a la vida adulta
La consejera ha asegurado que Carlos Maldonado, por su trayectoria, es un referente para los jóvenes y se ha referido al programa ‘Referentes’ con el que trabaja el Gobierno regional “y que, además, tenemos muy proyectado en la nueva Ley de Infancia y Familia” en la cual se trabaja la transición a la vida adulta, haciendo especial hincapié en la importancia de ayudar a los jóvenes que cumplen la mayoría de edad, “jóvenes tan vulnerables que, además, dependen de las administraciones”, a enfrentarse al mundo tratando de garantizarles apoyo económico, residencial, apoyo personal de profesionales, pero también una formación y una inclusión laboral, y en eso radica la importancia de este proyecto.
Tal y como ha afirmado García Torijano “tenemos algo muy valioso en Bienestar Social que son nuestros profesionales de los Servicios Sociales y también de las entidades que trabajan en los hogares de menores de Castilla-La Mancha”. Son ellos los que más de cerca “detectan y aprecian el potencial humano y el talento que tienen tantos jóvenes, que muchas veces no reconocemos y sin embargo, está ahí”.
Además, ha afirmado que, en estas edades entre la adolescencia y la juventud, es cuando se sientan las bases de nuestro proyecto de vida. Esa transición a la vida adulta a veces es complicada, y para aquellos chicos y chicas que no disponen del soporte de su familia y han pasado por alguna de las medidas de protección, esta transición es aún un poco más complicada.
También ha recordado que los y las jóvenes ex tutelados cuentan con el apoyo del Gobierno regional a través del Programa de Autonomía que en 2022 ha atendido a 198 personas en su transición a la vida adulta e independiente.
‘Proyecto Semillas’, una oportunidad para jóvenes en exclusión social
El restaurante escuela de hostelería ‘Semillas’ surgió del empeño de la Fundación Raíces y de Carlos Maldonado en particular por intentar hacer algo por la sociedad, especialmente por los más necesitados, como ha expresado el chef, quien ha asegurado que el sector de la hostelería está en constante crecimiento y demanda cada vez más trabajadores cualificados. Por eso, la formación en este sector es una oportunidad para los jóvenes a quienes, ha dicho, “no hay que ponerles etiquetas”, sino darles una oportunidad y confiar en ellos porque “son muy válidos, tienen mucho que decir y hay que intentar que sean ellos quienes creen su propio camino”.
Así, por parte de la Fundación ‘Raíces’, mediante el convenio firmado con la Administración regional, se comprometen a tener en cuenta las condiciones específicas de las personas jóvenes que realicen las prácticas formativas y laborales, orientándolas a la formación de competencias personales y laborales, al desarrollo personal y a la inclusión social.
Por su parte, la Consejería de Bienestar Social se compromete a difundir este proyecto entre su personal, entidades colaboradoras y otros departamentos y delegaciones del Gobierno regional y otras administraciones públicas, así como a proporcionar una relación de posibles candidatos o candidatas para este programa.
El protocolo tiene una vigencia dos años pudiendo prorrogarse por otros dos por voluntad de ambas partes.