El consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha anunciado que el Gobierno regional implementará una política presupuestaria rigurosa para promover el crecimiento económico y social, así como impulsar la transformación digital de la Administración. El objetivo es convertirla en uno de los principales motores de progreso en la región.
Durante su comparecencia en la Comisión de Economía y Presupuestos de las Cortes, Ruiz Molina resaltó que la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital coordinará los recursos financieros, humanos y tecnológicos para fortalecer el papel de la Administración regional en el crecimiento económico.
En cuanto a la reforma del sistema de financiación autonómica, el consejero destacó la necesidad de contar con una fuente de ingresos estable y suficiente. Asimismo, instó a la Administración del Estado a llevar a cabo esta reforma a través del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Ruiz Molina propuso tres ejes para el nuevo modelo: elevar los recursos financieros, condonar la deuda pública y lograr una armonización fiscal.
En cuanto a los recursos humanos, se prevé la aprobación de ofertas de empleo público con un total de 12.000 plazas a lo largo de la legislatura, siendo 5.000 para Sanidad y 3.000 para Educación. Además, se aplicarán los porcentajes máximos previstos en el Acuerdo Marco para las condiciones retributivas.
En cuanto a los recursos tecnológicos, se establecerá la Agencia de Transformación Digital para modernizar los servicios públicos y fomentar la innovación empresarial. También se diseñará una estrategia en ciberseguridad y se buscará una administración totalmente digitalizada y personalizada utilizando la inteligencia artificial como soporte tecnológico.
En materia de seguridad, se abordará una Ley de Protección Civil y Emergencias. Y se buscará potenciar la colaboración con la FEMP de Castilla-La Mancha en relación a la Administración Local.
Por su parte, el Partido Popular ha criticado la contratación de asesores y altos cargos por parte del gobierno regional, mientras la función pública sufre un empobrecimiento. Denuncian que estas contrataciones son para colocar a los cargos socialistas que se quedaron fuera en las elecciones.
En respuesta, el socialista Fernando Mora ha defendido la necesidad de abordar el modelo de financiación autonómica teniendo en cuenta las peculiaridades de Castilla-La Mancha, como la dispersión territorial. Además, ha recordado la deuda histórica de la comunidad autónoma con la Administración General del Estado.
En resumen, la política presupuestaria rigurosa impulsada por el Gobierno regional de Castilla-La Mancha busca promover el crecimiento económico y social, así como la transformación digital en la Administración. La reforma del sistema de financiación autonómica, la creación de empleo público, la modernización tecnológica de los servicios públicos y la colaboración con la FEMP son algunas de las medidas presentadas por el consejero de Hacienda.
