Cuenca, 30 de noviembre de 2017.- El Gobierno de Castilla-La Mancha y el coleccionista de arte Roberto Polo quieren que la Colección Polo se ubique en un único museo con dos sedes, una en Cuenca y otra en Toledo, que tengan identidad propia y que se complementen, de manera que se puedan generar “flujos de visitantes” entre ambas ciudades e incluso hacia otros museos españoles.
Así lo han avanzado este jueves el viceconsejero de Cultura, Jesús Carrascosa, y el filántropo cubano-estadounidense, durante su visita a las ciudades de Cuenca y Toledo para conocer, junto a un grupo de prestigiosos artistas y galeristas, los espacios que previsiblemente albergarán esta colección: el Archivo Histórico Provincial de Cuenca y el Convento de Santa Fe de Toledo, además de la Casa Zavala, espacio municipal que en el caso de Cuenca también acogerá una primera exposición de carácter temporal.
Ha sido precisamente durante la visita a Cuenca cuando Jesús Carrascosa ha agradecido nuevamente a Roberto Polo “su generosidad” y ha recordado que esta cesión “sitúa a Castilla-La Mancha como un referente de la cultura, el arte y los museos españoles, con lo que eso supone también para el turismo”.
El viceconsejero de Cultura ha señalado además que el proceso para que la colección Polo llegué a Cuenca y Toledo “progresa adecuadamente” y ha señalado que parte de ese proceso es que el coleccionista y sus colaboradores conozca personalmente los espacios que albergarán las obras cedidas a Castilla-La Mancha.
Por su parte, Roberto Polo ha explicado que concibe la sede de Cuenca como un museo de arte contemporáneo con un carácter más vanguardista porque “eso es lo que Cuenca representa”, mientras que el de Toledo será un museo de arte moderno, con obras de finales del siglo XIX a la actualidad.
Asimismo, ha avanzado que su equipo ya está trabajando junto al Gobierno regional en la programación de las exposiciones con la intención de publicar un catálogo de distribución internacional, lo que requiere de tiempo.
El coleccionista de arte ha señalado que las obras que ha cedido a Castilla-La Mancha pertenecen a las vanguardias históricas del centro, este y norte de Europa y Estados Unidos, muy poco representadas en las colecciones españolas, por lo vienen a llenar un vacío muy importante de la museografía española, como lo hizo hace 25 años la colección Thyssen Bornemisza.
Entre las más de 7.000 piezas que componen la colección Polo hay piezas las pertenecientes al alemán Oskar Schlemmer, Karl Schmidt-Rottluff, uno de los fundadores de Die Brücke; Jules Schmalzigaug; Georges Vantongerloo, presente también en las colecciones Guggenheim, Metropolitan Museum of Art, MoMA, Tate Modern y Centre Pompidou; Marthe Donas, Karel Maes, Jozef Peeters, Pierre-Louis Flouquet, que compartió estudio con Magritte y fue cofundador de la crucial revista 7 Arts; Marc Eemans y Eileen Gray, entre otros.