El Gobierno de Castilla-La Mancha y la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR) están comprometidos en seguir trabajando juntos para aumentar la presencia de las mujeres en el sector agropecuario. El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, felicitó a todas las mujeres que trabajan en el mundo rural de la región y en todo el planeta. Manifestó que el objetivo es aumentar su presencia no solo como titulares de explotaciones, sino en todos los ámbitos, incluyendo la industria agraria, las cooperativas y los espacios de toma de decisiones en las organizaciones.
Durante una reunión con la junta directiva de Fademur Castilla-La Mancha, encabezada por su presidenta Elisa Fernández y su coordinadora Lola Martín, Martínez Lizán reafirmó la voluntad del Gobierno de modificar el Estatuto de las Mujeres Rurales. Esta ley pionera en España busca reducir las desigualdades de género y otorgar a las mujeres el reconocimiento profesional que merecen, acabando con su infrarrepresentación y fortaleciendo su posición social y profesional en el mundo rural.
El consejero recordó que las mujeres tienen prioridad en todas las líneas de ayudas y subvenciones de la Consejería y mencionó otras medidas impulsadas en el Estatuto de las Mujeres Rurales, como la priorización de las organizaciones profesionales del sector que cuentan con un 40% de mujeres en sus órganos de decisión.
Estas políticas han dado resultados positivos, ya que desde 2016 ha habido un fuerte incremento en la incorporación de mujeres jóvenes a la agricultura y ganadería. Esto ha sido promovido por el Gobierno regional incluso antes de la aprobación del Estatuto. Desde 2016, se han incorporado 4.000 jóvenes al sector con ayudas del Gobierno, siendo un tercio de ellos mujeres.
El compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha y la colaboración con FADEMUR demuestran la importancia de seguir trabajando en la igualdad de género en el mundo rural. A través de cambios legislativos y políticas específicas, se está logrando que las mujeres tengan un papel protagonista en el sector agropecuario, contribuyendo así al desarrollo y progreso de las zonas rurales.
