El Gobierno de Castilla-La Mancha está dando pasos significativos en su lucha contra la despoblación en la región. En este sentido, se ha anunciado la puesta en marcha de 88 botiquines en 69 municipios afectados por este fenómeno, con el objetivo de facilitar el acceso a productos farmacéuticos a los habitantes de zonas rurales.
Estos botiquines se suman a los 203 ya existentes en áreas poco pobladas de Castilla-La Mancha, completando así la red de asistencia de las 458 farmacias rurales afectadas por la despoblación. Para financiar esta iniciativa, el Ejecutivo Autonómico ha destinado 810.981,23 euros procedentes de los Fondos de Cohesión.
Cada botiquín ha recibido una ayuda máxima de hasta 10.000 euros, beneficiando a un total de 88 núcleos de población en diferentes provincias de la región. En Albacete serán 13 núcleos de población, en Ciudad Real 10, en Cuenca 30, en Guadalajara 34 y en Toledo solo uno, el de Minas de Santa Quiteria, perteneciente a Sevilleja de la Jara.
Además, el comisionado del Reto Demográfico de Castilla-La Mancha, Jesús Alique, ha destacado la firma de un convenio de colaboración con el Colegio de Farmacéuticos para la puesta en marcha del servicio de entrega de medicamentos hospitalarios en zonas escasamente pobladas, con un importe de 1.059.996,26 euros.
Este servicio forma parte del programa de ‘Mejora de Asistencia Farmacéutica a personas que residen en zonas rurales afectadas por la despoblación en Castilla-La Mancha’, y tiene como objetivo facilitar la entrega de medicamentos de dispensación hospitalaria en áreas de intensa y extrema despoblación.
En resumen, estas iniciativas son ejemplos de buenas prácticas en la gestión de los Fondos de Cohesión para abordar la pérdida demográfica en las zonas rurales de Castilla-La Mancha, teniendo en cuenta las necesidades de los habitantes de estas áreas, especialmente los mayores. Con medidas como estas, el Gobierno regional sigue comprometido en su lucha por frenar la despoblación y mejorar la calidad de vida en el medio rural.