El Gobierno de Castilla-La Mancha mantiene un estado de vigilancia en relación a la crecida de los ríos en las provincias de Guadalajara y Toledo. Esta atención se intensifica debido a la combinación de las recientes lluvias, el aumento de las temperaturas y el consiguiente deshielo, lo que podría resultar en un incremento de los caudales y los desembalses.
La portavoz regional, Esther Padilla, ha señalado en una rueda de prensa que se está llevando a cabo un seguimiento permanente desde el sistema de emergencias Pricam. “Estamos muy en alerta y muy pendientes”, ha declarado a los medios, subrayando la importancia de la situación actual.
En otro orden de cosas, Padilla ha valorado la colaboración del Gobierno de España en la reconstrucción del Puente Viejo de Talavera de la Reina. “Queremos felicitarnos por ello”, ha dicho, destacando que el presidente regional, Emiliano García-Page, mostró su disposición desde el comienzo para apoyar la restauración de este emblemático monumento.
En cuanto a las recomendaciones de la Comisión Europea en caso de crisis, Padilla ha comentado que estas han sorprendido a la población y que es fundamental actuar con precaución. Sin embargo, también ha enfatizado la importancia de no generar un estado de alarma desmedida. “Es bueno seguir las recomendaciones, pero creo que tampoco es bueno generar una alarma entre la población, cuando generalmente todos realizamos compras más allá de esos tres días que han recomendado”, ha declarado.
La portavoz ha expresado la intención de observar cómo evolucionan las decisiones de la Unión Europea y ha asegurado que el Gobierno de Castilla-La Mancha tomará las medidas más adecuadas para garantizar el bienestar de la ciudadanía.
