El alcalde de Puertollano, Miguel Ángel Ruiz, junto con el concejal de Festejos, Juan Sebastián López Berdonces, han compartido su perspectiva positiva respecto a la recién concluida Feria de Mayo de la ciudad. El equipo de Gobierno resalta que la feria ha alcanzado los objetivos de innovación, una programación extendida a lo largo de diez días y un atractivo universal para todos los visitantes.
Durante una rueda de prensa, el concejal López Berdonces ha resaltado la ausencia de incidentes durante las festividades y el éxito del discurso inaugural a cargo de Manuel Juliá. La celebración, que tuvo lugar en el espacio de casetas, acogió a visitantes de todas las edades, demostrando el buen funcionamiento de este componente integral de la feria.
Además, se ha hecho referencia a la gestión del ‘botellón’ controlado, el cual fue disuelto sin contratiempos diariamente, aunque se instó a los jóvenes a mejorar en aspectos de limpieza y uso de contenedores para los residuos. El concejal ha elogiado el «gran ambiente» en las casetas y ha hecho notar el aumento de actos en la caseta municipal.
El concierto de Ana Mena se destacó como uno de los puntos fuertes de la feria, con un costo eficiente de 7.000 euros para el ayuntamiento gracias a la recaudación de taquilla. Otro aspecto celebrado ha sido el regreso de los eventos taurinos al coso polivalente, que ha revitalizado este espacio para el disfrute de los ciudadanos.
A pesar de los aspectos positivos, el Gobierno local no ha evitado la autocrítica. Se ha considerado la posibilidad de cambiar la ubicación de la carpa municipal en futuras ediciones y se ha reflexionado sobre el lugar del escenario de actuaciones, que actualmente se sitúa en una zona que podría estar interfiriendo con otras actividades. Se busca un balance que permita el flujo armonioso tanto de las actividades como del sector hostelero.
Se ha agradecido la colaboración de todas las partes involucradas en la feria, incluyendo los feriantes, el público general, las fuerzas de seguridad, Protección Civil, la Cruz Roja y los funcionarios del municipio.
En relación con los problemas eléctricos iniciales que suscitaron dudas sobre la viabilidad de la inauguración, el alcalde Ruiz expresó su desconcierto ante las acciones de la compañía eléctrica, que ordenó cerrar los puntos de conexión por no cumplir con las normas de seguridad, para luego cambiar su postura durante el mismo día. Aunque Ruiz no concretó si existía alguna intención oculta detrás de estas acciones, manifestó su voluntad de colaboración con la compañía para asegurar el buen desarrollo de futuros eventos.