En un giro sorprendente de los acontecimientos, la escena española de influencers y medios de comunicación ha sido testigo de una disputa entre dos conocidas personalidades. Inés Hernand, reconocida por su participación en «MasterChef Celebrity» y presentadora de «La familia de la tele», ha sacado a la luz un conflicto con María Pombo, premiada como «influencer del año» en una reciente gala. Hernand reveló que Pombo la había bloqueado en las redes sociales después de que ella comentara con un «jajaja» en un vídeo que parodiaba a Pombo.
La situación se intensificó durante la entrega de premios, donde Hernand, encargada de presentar el galardón a Pombo, indicó que la influencer la ignoró completamente, tratándola como si fuera «transparente». Esta acción no ha pasado desapercibida ni por la audiencia ni por las propias involucradas, desatando reacciones en redes sociales.
María Pombo no tardó en defender su acción a través de un comentario en TikTok, argumentando que no puede tolerar que se mofen de ella por tener opiniones distintas y luego se espere una actitud cordial en eventos públicos. Pombo sostenía que la verdadera clase consiste en el respeto y en no invadir el espacio personal de otros, aunque luego optó por borrar dicho comentario.
No obstante, Inés Hernand respondió a la justificación de Pombo, subrayando que su «valentía» no fue más que una reacción humorística hacia una parodia, algo bastante común en la televisión y los medios. Asegura que, en ningún momento, faltó al respeto a Pombo, comparando la situación con otras parodias bien recibidas del panorama español.
Este intercambio no ha sido solo una sucesión de comentarios en redes sociales, sino que también ha sacado a la luz los límites del humor y el respeto en la esfera pública. Hernand, en un movimiento poco usual, citó un versículo bíblico para hacer reflexionar a Pombo sobre el perdón, indicativo del nivel de personal que se ha tornado este desencuentro.
Este episodio resalta la complejidad de las relaciones en el mundo digital, donde un simple comentario puede desatar una cadena de eventos imprevistos. Además, pone en evidencia la tensión entre la vida pública y privada de las figuras mediáticas, un equilibrio siempre delicado y a menudo difícil de mantener. Con ambos lados presentando sus argumentos, el episodio invita a una reflexión más amplia sobre la interacción en las redes sociales, el impacto de las palabras y la importancia de la tolerancia y el respeto mutuo en el espacio público.