El COVID empujó a la pobreza y exclusión social a 36.000 nuevas personas de C-LM que tiene ya 665.000, una cifra "seria"

El COVID empujó a la pobreza y exclusión social a 36.000 nuevas personas de C-LM que tiene ya 665.000, una cifra "seria"

El XII Informe ‘El Estado de Pobreza: Seguimiento de los Indicadores de la Agenda 2030 UE (2015-2021)’ refleja el impacto que la pandemia del COVID ha tenido sobre la población castellanamonchega y desvela que empujó a 36.000 nuevas personas de la región a la pobreza y/o exclusión social, de tal modo que ya hay un total de 665.000 en ese estado.

Este dato, en una región de poco más de dos millones de habitantes es «serio y preocupante», ha alertado el presidente de EAPN-CLM, Adolfo Patón, que ha presentado en rueda de prensa junto al sociólogo Juan Carlos Llano dicho informe, que «sitúa a la pobreza en un lugar central de la agenda política».

En base a este pormenorizado estudio, en 2021 Castilla-La Mancha rompió la tendencia descendente que venía experimentando desde 2016 y registró una tasa AROPE del 32,5%, con 665.000 personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social, lo que implica un incremento de 1,8 puntos.

Con ese 32,5%, la castellanomanchega se sitúa por encima de la media nacional, que es del 27,8%, y sitúa a la región en una posición intermedia en el conjunto de comunidades autónomas: la segunda por encima de la media nacional e inferior a Murcia, Canarias, Extremadura, Andalucía y las dos ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

Pese al incremento de la pobreza que el COVID ha provocado, Juan Carlos Llano ha destacado que ese aumento ha sido muy inferior a lo que preveía, pues las estimaciones, pese a haber sido hechas de forma muy rigurosa, no tuvieron en cuenta la acción del Estado.

«Una de las mejores cosas de este informe es que pone en valor con mucha intensidad la acción del Estado para mantener un mundo más equilibrado. Sin el escudo social del Estado, la tasa de pobreza sería un 20 por ciento más alta que ahora», ha valorado el autor de este estudio.

En este punto, ha hecho una férrea defensa de la función redistributiva del Estado que, a su entender, lleva 50 años demostrando que en Europa «no se han creado divisiones y esto nos ha hecho vivir en paz y convivencia». La única cosa que crea divisiones es la pobreza, no la cohesión social», ha insistido este sociólogo.

No obstante, ha precisado que el COVID fue un aspecto sobrevenido que no tiene toda la culpa del exceso de pobreza, el fenómeno responde a casas estructurales y sociales.

SE ENSANCHA LA BRECHA DE GÉNERO

Otro de los datos del informe sobre los que EAPN ha dado la voz de alarma ha sido que en el 2021 la brecha de género se ha ensanchado a su valor máximo, a causa del importante incremento de 2,5 puntos porcentuales en la tasa femenina. Entre los varones, la tasa también ha aumentado, pero solo lo ha hecho en 9 décimas, un tercio del primero. En términos absolutos hay en Castilla- La Mancha 313.000 varones y 352.000 mujeres en situación de pobreza y/o exclusión social.

Respecto a la edad, las personas de 65 años o más registraron hasta 2018 tasas AROPE notablemente más bajas que el resto de los grupos. Sin embargo, en los últimos tres años han sufrido un importante incremento que la ha llevado hasta del 35%, cifra que durante los dos últimos años es la más alta entre los grupos de edad.

En esta cuestión desempeñan un papel clave las pensiones. De ahí que Juan Carlos Llano haya celebrado la intención del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, de recortar la brecha de género en pensiones. «Tenemos que ser capaces de presionar a la persona que decide sobre eso para que dedique recursos», ha reclamado.

GASTOS EN VIVIENDA

Desde EAPN también han puesto el foco en otra cuestión muy importante en la generación de pobreza, como es la intensidad del gasto que deben afrontar las familias para cumplir con sus necesidades de vivienda. En Castilla-La Mancha, el 7,8% de la población tiene gastos de vivienda superiores al 40% de su renta disponible, sin embargo, entre las personas pobres la cifra se triplica y alcanza al 25,1%.

De igual modo, han alertado que el 19,2% de las personas pobres gasta en vivienda más de la mitad de su renta, lo que supone un aumento de 9,1 puntos con respecto al año anterior.

POBREZA SEVERA

En cuanto a la tasa de pobreza severa, el informe dado a conocer este lunes contempla que el porcentaje de personas que viven en hogares con un ingreso máximo de 530 euros mensuales por unidad de consumo, en Castilla-La Mancha es del 11,9%, esto es, un total de 244.000 personas.

«Este dato refleja un notable crecimiento con respecto a la situación del año pasado: la tasa de pobreza severa sube 2,5 puntos porcentuales. En este sentido, Castilla-La Mancha sufre un incremento en la diferencia con la media nacional: desde cifras prácticamente iguales entre el país y la región, ahora la región supera en 1,8 puntos porcentuales la media nacional de pobreza severa».

Sobre este aspecto el autor del informe ha hecho un inciso sobre dos elementos de privación material y social severa. En primer lugar, ha alertado del alto porcentaje de personas que no pueden mantener una conexión a Internet, fija o móvil, que alcanza el 12,2% y multiplica por 4,5 el valor registrado en el conjunto nacional.

Tras reparar en la importancia que tiene este indicador «para integrarse en sociedad actual», ha incidido en la urgencia de resolver el problema de alfabetización tecnológica pues, a su entender, «sienta las bases para resolver de una vez por todas el problema de la pobreza». «Sin esto no hay futuro», ha considerado.

Igual de preocupantes son las condiciones de habitabilidad del hogar, dado que el número de personas que no puede permitirse mantener la vivienda a una temperatura adecuada aumenta de un 9,7% a un 13,6% en la región.

Por último, desde EAPN han alarmado sobre el hecho de que el 44,5% de la población castellanomanchega experimente dificultades para llegar a fin de mes, lo que supone un incremento de 5,2 puntos porcentuales con respecto a 2020, subida que viene a acabar con un largo período de descenso desde el año 2016.

RENTA Y DESIGUALDAD

La renta media por persona en Castilla-La Mancha es de 10.257 euros, algo más de 2.000 euros inferior a la renta media nacional y la quinta más baja de todas las regiones, solo inferior a Canarias, Murcia, Andalucía y Extremadura. Con respecto al año anterior, la renta por persona en Castilla-La Mancha ha disminuido en 228 euros mientras que la media nacional ha aumentado ligeramente.

Desde EAPN indican que similares conclusiones, pero aún más acentuadas, se pueden aplicar a la renta por unidad de consumo. Para 2021 es de 15.350 euros, cifra que es 2.753 euros inferior a la media nacional y con una reducción en el último año algo superior: la caída fue de 452 euros respecto año pasado, mientras para el total nacional solo descendió 13 euros. Respecto al resto de territorio, Castilla-La Mancha ocupa el quinto lugar con la renta más baja por unidad de consumo.

Por último, el ‘El Estado de Pobreza: Seguimiento de los Indicadores de la Agenda 2030 UE’ desvela que la cantidad de gente pobre es algo menor que el año pasado, pero es mucho más pobre y, por el lado contrario, se reduce el porcentaje de la población más rica pero, a cambio, sus ingresos son mucho más elevados.

«Puede concluirse, entonces, que en los años de la crisis COVID se produjo un importante incremento de la desigualdad que en Castilla-La Mancha se midió con más intensidad», han terminado alarmando desde EAPN.

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